El capítulo número 13 de "Monzón, la serie" se puso al aire el pasado lunes y más allá de ser noticia por ser el último episodio, lo fue por la violenta escena en la que Alicia Muniz es asesinada por el excampeón mundial de boxeo argentino.
En la ficción basada en la vida de Carlos Monzón se logró recrear el femicidio ocurrido en la madrugada del 14 de febrero de 1988 y por el cual, el ex deportista santafesino, fue condenado a 11 años de prisión por homicidio simple.
Quienes protagonizaron esa escena fueron Jorge Román y Carla Quevedo. El actor debió estrangular a su compañera de elenco y luego tirarla al vacío desde un balcón, así como hizo Monzón con la madre de su hijo Maximiliano, en la casa de Mar del Plata donde pasó la temporada veraniega.
"Todos sabíamos que si esta escena no funcionaba, no funcionaba la serie", dijo Quevedo, quien tuvo que "sentir" el rigor de la situación. "El cuerpo no distingue la ficción de la realidad", comentó la actriz que sufrió contracturas en la columna.
"Haber hecho esto fue un antes y un después para mí", confío Carla quien opinó respecto a su compañero: Fuimos muy afortunados al habernos encontrado porque no tengo dudas de que el resultado tiene que ver con la confianza que pudimos tener el uno con el otro".
Para la credibilidad de la escena, la dupla recibió entrenamiento con profesionales y sobre ello, la artista compartió: "Para la cuestión más física tuvimos una gente de efectos especiales para practicar golpes porque si bien uno quiere que se vea real, teníamos que estar cuidados".
Una semana entera llevó filmar el momento del trágico final de Muniz; "es un montón para lo que suelen ser los tiempos de rodaje en nuestro país. Le dimos el tiempo que se merecía para que el resultado fuera bueno y para cuidarnos también", comentó la joven actriz de 31 años.
