A puro pulmón, sacrificando muchas horas de trabajo y con la valiosa ayuda de varias personas ajenas a su equipo, Lucas Mohamed logró poner a punto el Volkswagen Gol para defender la cima del campeonato en el autódromo de San Martín. “Trabajamos a fondo con todo. Recibí mucha ayuda de la gente y también de algunos auspiciantes.
Algunos me dieron una gran mano en la parte de chapa y pintura, mientras que los demás se sumaron a la reparación en otros asuntos adicionales. Hasta una persona me trajo la puerta que necesitaba y el radiador que me faltaba”, dijo el tucumano, que debió reconstruir su auto después del golpe en Toay.
Desde Yerba Buena, su ciudad, partió el pasado miércoles al volante de su querido motorhome (un Mercedes Benz 1114) rumbo al circuito Jorge Ángel Pena, donde resultó sexto en 2010 e intentará reanudar el buen trabajo que venía realizando para recuperar lo perdido en la última fecha. “Mi objetivo es ganar. Le vengo esquivando desde la primera fecha y me gustaría poder lograrlo esta vez. Quiero que se me dé un fin de semana redondo”, cerró Mohamed, quien aventaja a Adrián Percaz por sólo tres puntos.