Seis de siete. Cuatro en forma consecutiva. Mendoza es una potencia a nivel nacional en el futsal femenino y ya no sorprenden los éxitos de la selección.
Jesús Ayala, técnico del equipo Borravino, es un referente ineludible del futsal femenino y con toda su experiencia y a instantes de haber logrado el título, hizo un análisis de lo ocurrido en Misiones.
"Costó mucho aunque no parezca. Apostamos al proceso. Apostamos al recambio. Trajimos tres jugadoras nuevas, dos menores de 20 años ( Delfina Rodríguez y Candela Giovarruscio) y siempre contamos con las ganas de las referente de querer estar y trabajan mucho. Trabajan duro.
El primer análisis es que hay mucho para trabajar. Hay mucho para mejorar. Ni bien lleguemos tenemos que ponernos a trabajar con el C 20 y renovar constantemente sueños e ilusiones".
-¿La base se mantiene y el grupo se muestra muy unido. Cómo se logra eso?
-Hablamos con las jugadoras al principio. Por ahí fue lo que más costó armar el grupo. En el proceso hubo jugadoras que se fueron cayendo, pero aquellas que realmente aman la Borravino y la defienden son las que siempre van a estar y son fundamentales para ir agregando jugadoras nuevas. Hemos incorporado cosas nuevas en cuanto al sistema, a lo táctico y todos los años van innovando. Siempre hay algo para trabajar.
Nosotros trabajamos por nosotros, no mirando a los rivales. A veces las cosas nos pueden salir, pero este equipo tiene la obligación de no darse por vencido. Estamos en modo borravino.
-¿Cómo se consigue ese modo borravino?
-es lo.que se transmite desde la Federación. La pasión que tenemos. Esta camiseta es muy glorioso. Es pesada culpa de los jugadores que la han llevado allá arriba y sostenerla no es fácil. Estas chicas entrenaron tres veces por semana en doble turno, a veces los domingos.
-Un mensaje para Mendoza?
-Que se queden tranquilos que donde haya un mendocino jugando al futsal. Siempre seremos protagonista.
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