El programa Conectar Igualdad ha distribuido en Mendoza más de 170 mil netbooks en colegios secundarios públicos y 3.700.000 en el país. Aunque la experiencia de algunos no haya sido del todo positiva, para otros ha sido un verdadero aporte. Así lo destacó Leonardo Simón, director de Integración Digital de la DGE, quien los últimos días participó en Tecnópolis (en Buenos Aires) con un grupo de alumnos y docentes que mostraron sus experiencias con esta nueva herramienta.
“Muestran iniciativas muy interesantes que implican nuevas formas de aprender y estar en la escuela con muchas potencialidades”, explicó el funcionario, quien agregó que estos antes eran casos aislados pero que se reproducen cada vez más. Se trata de un cambio de lógica en el aprendizaje, en el cual la netbook está aportando novedosas maneras de interrelación entre docentes y alumnos y que al mismo tiempo desdibuja las paredes de la escuela para trasladarse fuera del aula. “Hemos visto cómo hay alumnos que a la madrugada están respondiendo trabajos en Facebook”, indicó Simón.
Graciela Bertancud es coordinadora de TIC de la escuela privada Tomás Alva Edison, pionera en la tecnología en el aula en la provincia desde hace 8 años. Para ella, “el plan Conectar Igualdad es lo mejor que le pasó a la educación en muchos años, porque es un recurso inagotable. Creo que se están viendo los caminos para aprovecharlo y que hay que aceptar esta etapa; los docentes al menos están pensando qué hacer con ellas y los alumnos las tienen en sus manos”. Como experta en el tema, consideró que llevará al menos 5 años poder ver resultados.
Bertancud dijo que hay que enseñarles a los chicos las nuevas tecnologías porque las manejan pero no saben usarlas. “La escuela tiene que empezar a dar herramientas para hacer textos digitales, seguimos trabajando en papel y ya nadie presenta trabajos a mano; en ese sentido se contradice con lo que requiere el mercado laboral”.
Simón dijo conocer las dificultades que se presentan. Respecto de las roturas, dijo que se trata de algo propio de un aparato que se manipula diariamente. Respecto de la conectividad, explicó que “no es la intención que todos naveguen a la vez” y que es un error creer que sólo pueden usarse con internet, ya que los programas que tienen instalados no lo necesitan.
Por su parte, el ministro de Educación de la Nación destacó el viernes en Tecnópolis que con este programa “la escuela pública argentina tiene hoy brecha digital cero” y calificó a las netbooks como “poderosas herramientas de igualación social” que restituyen en los chicos “el derecho de recibir una netbook a su nombre y desplegarla en la mesa familiar”.
