Confiado, con la tranquilidad de haber cortado una racha que ya acumulaba cinco partidos sin ganar, Matías Minich, entrenador del Azul, se presentó a la conferencia de prensa y celebró los tres puntos y el modo en que fueron conseguidos.
“Estábamos buscando el triunfo que se le había negado al proceso anterior y volvimos a ver agresividad e intención a la hora de jugar. Teníamos que ganar en casa y finalmente lo hicimos. Nos vamos felices”.
Además, habló del bajón del complemento: "Esa intensidad que tuvimos en el primer tiempo nos pasó factura en el segundo. También complicó el cambio de sistema que realizó el rival. En ese reacomodar fichas llegó el gol de ellos. Por suerte tuvimos paciencia para revertirlo".
"Es un grupo de jugadores que está comprometido con sacar a Independiente Rivadavia de los puestos de abajo. Yo trabajo con muchas ganas y alegría. Conocemos el club y nos apoyamos en este grupo de jugadores. Ellos siempre están motivados para ganar. A veces sucede y otras no. Hoy tuvimos la posibilidad de cambiar algo desde lo táctico".
"Julián (Navas) venía arrastrando una molestia y estaba cantada su salida. Él nos manifestó que estaba cansado. Enzo (Suraci) entró de la mejor manera, con personalidad y rendimiento", cerró.