Mañana será el acto de traspaso de mando de la presidencia entre Mauricio Macri y Alberto Fernández. El mandatario electo asumirá jurará y emitirá su primer discurso con el bastón de mando. Así como Cristina Fernández hará lo mismo como Vicepresidenta. En Plaza de Mayo habrá una fiesta con la militancia peronista y organizaciones sociales.
El evento comenzará alrededor de las 10, con una sesión en el Congreso. Gabriela Michetti, vicepresidenta saliente, hará la lectura del día. Sergio Massa, nuevo presidente de la Cámara de Diputados, izará la bandera y se aprobarán las designaciones de las comisiones de recepción interior y exterior conformadas por ocho diputados y ocho senadores.
La idea de Alberto Fernández es asumir en el Congreso con el traspaso de mando de parte de Mauricio Macri, trasladarse luego a la Casa Rosada en su auto privado junto con Cristina Kirchner (en el mismo vehículo) para la jura de ministros y el saludo a las delegaciones extranjeras.
Desde la 14, Fernández encabezará un acto masivo en la Plaza de Mayo donde será el orador central. "Alberto quiere mostrarse cerca de la gente, saludar, hablar al pueblo y entablar una cercanía al ciudadano común", explicó uno de los armadores de este operativo para la asunción.
Varios ya les confirmaron a los organizadores del Frente de Todos la presencia de sus representantes: los presidentes salientes y entrantes de Uruguay, Tabaré Vázquez y Luis Lacalle Pou; el de Paraguay, Mario Abdo Benítez; el jefe de Estado de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y uno de los históricos de la revolución de la isla, Raúl Castro.
No vendrán Lula Da Silva ni Evo Morales, aunque habían sido invitados. Pero los allegados a Fernández dijeron que “hay impedimentos personales” que harán imposible esas presencias. Tampoco estará presente el ministro de Ciencia y Tecnología de Israel Ofir Akunis por el proceso electoral complejo que transita su país.
Donald Trump tampoco estará, pero enviará al secretario de Salud de Estados Unidos, Alex Azar, mientras que Pedro Sánchez mandará a la flamante presidenta del Senado de España, Pilar Llop, que asumió el 3 de diciembre.
Una vez que el flamante presidente salude a los delegados extranjeros se trasladará a un escenario dispuesto en la Plaza de Mayo. Allí estarán distribuidos casi matemáticamente referentes de los movimientos sociales y los referentes de intendentes y gobernadores del PJ en la Avenida de Mayo, en tanto que Diagonal Sur y Norte fue dispuesta para las columnas sindicales. Y la Plaza de Mayo en sí misma fue dispuesta para preservar a los que se movilicen por su cuenta.
Además se pudo constatar que durante la reunión que mantuvo con el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en las oficinas de Puerto Madero, Fernández y su equipo le pidieron al mandatario porteño que retirara las rejas que dividen la Plaza de Mayo de la Casa Rosada para dar lugar a la multitud. Esa es otra señal que quiere dar el nuevo presidente: mantener mayor cercanía de la gente con el próximo gobierno.
La intención del nuevo presidente es dar una muestra cabal de la amplitud de criterios que tendrá su gobierno aunque se le dará un sello de tradición peronista muy marcado. La presencia de columnas de intendentes del PJ del conurbano, gobernadores peronistas ortodoxos y las diferentes agrupaciones gremiales buscan darle esa mística peronista al acto.
Está previsto que Alberto Fernández emita allí un discurso no muy extenso y que Cristina Kirchner salude también a la multitud, aunque no está previsto que hable.