La UEFA suspendió al Milán, donde juega el volante argentino Lucas Biglia, por incumplir con el Fair Play financiero y no le permitirá jugar la Europa League 2018-2019 a la que había clasificado en la temporada que finalizó.
Si bien la sanción excluye a los italianos por dos años, el comunicado del ente del fútbol europeo aclara que sólo lo privará de jugar un certamen continental al que clasifique durante ese periodo. Como ya había ingresado a un torneo, podrá disputar competencias internacionales en 2019-2020 si es que logra clasificar.
“El club queda excluido de participar en la próxima competición de clubes de la UEFA para la que se clasifique en las próximas dos (2) temporadas (es decir, una competición en 2018/19 o en 2019/20, sujeta a calificación)”, explica la UEFA.
El Atalanta dejará ocupará su lugar en la Europa League.
La UEFA confirmó la resolución que impide al Milan participar en la próxima Liga Europa y explicó que es consecuencia del incumplimiento “en el requisito del punto de equilibrio”.
El club podrá presentar recurso contra esta sanción ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), según indicó la UEFA.
El pasado 22 de mayo la Cámara de Investigación del CFCB trasladó el caso del Milan al órgano de resolución por considerar que “las circunstancias no permitían la celebración de un acuerdo de resolución”.
Este órgano consideró que existían “incertidumbres en relación con la refinanciación del préstamo y las cantidades que deben ser pagadas en octubre de 2018”.
Un préstamo, una negativa
El Milan invirtió unos 200 millones de euros en el mercado de fichajes de verano 2017 y ante las dudas de cumplimiento del 'Juego Limpio Financiero' presentó a la UEFA un plan económico voluntario que resolviese la situación, que fue rechazado por la CFCB en diciembre de 2017.
La CFCB decidió entonces mantener el caso sujeto a un proceso de supervisión y evaluación durante los primeros meses de 2018.
Una delegación del Milan acudió el 19 de junio a la sede de la UEFA en Nyon para presentar argumentos en su defensa y tras la reunión su consejero delegado, Marco Fassone, pidió que se evaluase al club “coherentemente con las decisiones adoptadas en los años pasados”.
”Tenemos la sensación que el hecho de que nos hayan remitido a la Cámara de Adjudicación es diferente con respecto a cómo han sido analizados otros casos. Si la decisión se evalúa como excesivamente dura, el camino del recurso es algo posible”, señaló.