San Salvador de Jujuy. La dirigente Milagro Sala, líder de la organización Tupac Amaru, fue detenida ayer en su casa de la capital jujeña, tras un allanamiento a la vivienda.
La detención de Sala fue dispuesta por el juez de Control provincial Raúl Gutiérrez, en una causa en la que también intervino la fiscal Liliana Montiel, y se produjo pasado el mediodía en su casa del barrio Cuyaya, que fue allanada, tras lo cual fue trasladada en un patrullero a la Comisaría de la Mujer, en el barrio Huaico.
La medida judicial, llevada adelante bajo la imputación de “instigación al delito y tumulto”, tuvo lugar a raíz del acampe que impulsó la diputada por el Parlasur desde hace varias semanas frente a la gobernación de Jujuy, en rechazo al reordenamiento de la distribución de subsidios a cooperativas que planteó el nuevo gobierno del radical Gerardo Morales.
Tras la detención, el abogado de Sala, Luis Paz, aseguró que su defendida “inició una huelga de hambre” y responsabilizó al gobierno provincial. “No nos sorprende la actitud de un gobierno de derecha como el que representan Morales y (el presidente Mauricio) Macri a nivel nacional”.
Además, aseguró que “después de 33 días de acampe (frente a la sede gubernamental), la criminalización de la protesta era lo que se venía”.
Por otro lado, el gobernador Morales advirtió: “No voy a negociar el levantamiento del acampe por la liberación de Milagro Sala. Nosotros seguimos presentando denuncias. El lunes voy a presentar una denuncia por los 29 millones de pesos que se robaron. Hay 19 denuncias penales más que tenemos listas por malversación de fondos; esto está impidiendo que muchas cooperativas sigan sus obras”, añadió al canal de noticias TN.
El vicegobernador de Jujuy, Carlos Haquim, calificó como “una buena noticia” para la provincia la detención de Sala, y destacó que “la justicia está funcionando”.
Haquim agregó que la medida fue a raíz de “una sumatoria de causas, no solo la vinculada a la protesta”, y afirmó en diálogo con radio 10 que “Milagro Sala era quien cogobernaba la provincia desde hace muchos años y esto se terminó”.
La policía provincial montó un fuerte operativo de seguridad en torno a la vivienda de Sala, así como en la plaza Belgrano, donde permanecían seguidores de la Tupac Amaru, mientras que en la ciudad de Buenos Aires se realizó una movilización frente a la Casa de Jujuy, donde se convocó a realizar una nueva protesta para mañana, a las 17, en Plaza de Mayo.
El gobierno de Morales había presentado en los últimos días nuevas denuncias penales contra Sala (que a pesar de ser electa diputada por el Parlasur no cuenta con fueros, a raíz de una disposición de la Cámara Electoral a finales de 2015), que ya acumulaba varias causas judiciales por diversas irregularidades en su contra.
A raíz de la detención, dirigentes del kirchnerismo como Aníbal Fernández, Carlos Tomada y Daniel Filmus, entre otros, criticaron “la represión” y la “criminalización de la protesta social”.
El ex ministro de Defensa Agustín Rossi, expresó a través de su cuenta de Twitter que “detener a una dirigente social es inaceptable” y que “allanar su vivienda también”, y consideró que “hoy es Milagro Sala, mañana puede ser cualquiera”.
La propia Sala utilizó su cuenta de Twitter para notificar el momento de la detención: “En este momento la policía de Gerardo Morales me está deteniendo, esto es como en la dictadura”.
Poder corroído
Hasta hace menos de tres meses, Sala exhibía sin disimulo un poder paraestatal poca veces visto: por sus manos pasaban cientos de millones de pesos para sostener una estructura tan poderosa como la del Gobierno provincial. Los fondos le llegaba de manera directa desde la Nación.
El triunfo de Morales en la provincia y Macri en la Nación cambió el escenario. La respuesta de “La Milagro” a la falta de financiamiento fue instantánea: a sólo tres días de haber asumido Morales, la dirigente tomó la principal plaza de Jujuy, frente a la gobernación, y armó un acampe con 26 organizaciones sociales.
El martes, unas 10 organizaciones decidieron abandonar el lugar. El jueves, el Gobierno jujeño le retiró la personería jurídica a la organización Tupac Amaru.