Migliore no declaró y quedó detenido en el penal de Ezeiza

Pablo Migliore, el arquero de San Lorenzo que está acusado de haber protegido a Maximiliano Mazzaro, uno de los jefes de la barra brava de Boca Juniors prófugo por un crimen, se negó hoy a declarar y quedó detenido en el penal de Ezeiza por el delito de encubrimiento agravado. Aunque Migliore guardó silencio en su indagatoria por consejo de sus abogados, la defensa del arquero sostuvo que su cliente es inocente y que corresponde que esté libre porque no perjudicará la acción de la Justicia ni tampoco se fugará. No obstante, la defensa desistió de presentar un pedido de excarcelación ante la certeza de una negativa segura por parte del juez de instrucción Manuel De Campos, quien en la noche del domingo detuvo al futbolista en el estadio Nuevo Gasómetro, tras el partido que San Lorenzo jugó con Newell's. "Si el juez quiere lo puede tener detenido dos semanas. Tenemos que pensar un poco, ver qué pruebas hay -dijo el abogado Víctor Stinfale, defensor de Migliore-. Si existió alguna acción de prestarle un dinero a una persona prófuga, hay que tener en cuenta que esa persona es un hincha de fútbol 'caracterizado' y no es fácil decirle 'no' a una persona de esas características". En tanto, desde la clandestinidad, el sindicado número dos de la barra, Maximiliano "Maxi" Mazzaro, a quien la Justicia busca desde enero de este año por estar acusado de homicidio, dijo que se apenaba de la detención del arquero de San Lorenzo y quiso 'despegarlo'. "Mazzaro se comunicó conmigo, está triste. Ve cómo la Justicia presiona con modos no normales -dijo el defensor de Mazzaro, Horacio Rivero-. Mazzaro nunca se comunicó ni estuvo con Pablo Migliore en ningún momento". Al respecto, Rivero planteó que pudo haber habido una "cuestión política" porque la causa se activó más de un año después del hecho, al tiempo que la defensa del jefe de la barra boquense, el detenido Mauro Martín, denunció que el juez Campos montó "un operativo" para detener a Migliore, quien finalmente quedó alojado en el Módulo 1 del penal de Ezeiza. El caso ocurrió en la noche del 29 de agosto de 2011, cuando Ernesto Cirini, de 58 años, discutió con un grupo de personas en las calles Caaguazú y Pieres, de Liniers (CABA), donde recibió una trompada, y murió al día siguiente en el Hospital Santojanni. Martín dijo que había ido hasta allí convocado por su cuñado pensando que le estaban robando, pero se encontró con que lo habían llamado por una pelea callejera en torno a un perro que ensuciaba una vereda. Martín dijo que criticó a su cuñado por convocarlo por esa nimiedad y se fue, pero el juez tiene probado que alguien golpeó a Cirini, le provocó la lesión que derivó en su muerte y que todos se fueron juntos. Desde noviembre pasado están presos Martín y su cuñado Gustavo Petrinelli, a los que se acusa de ser partícipes necesarios del homicidio, mientras permanecen prófugos las otras dos personas que habrían estado en el lugar de los hechos: Mazzaro y Daniel Whebe, sindicado en el expediente como el supuesto autor del golpe fatal. Hace unas semanas también quedó preso Maximiliano Levy, un barra de Boca que no estuvo en el lugar de los hechos pero fue acusado de encubrimiento agravado, el mismo delito que ahora se le imputa a Pablo Migliore. Ahora, el juez De Campos tiene elementos para creer que Migliore realizó una serie de acciones para garantizar la impunidad de Mazzaro en la causa en la que está prófugo, y dispuso arrestarlo por encubrimiento agravado, delito castigado con uno a seis años de cárcel. Ahora, Migliore permanecerá tras las rejas hasta que el pedido de su libertad sea analizado en la Cámara del Crimen, donde justo el próximo miércoles habrá una audiencia clave para la defensa de Mauro Martín. Precisamente, la Sala V de la Cámara del Crimen debe analizar el pedido para anular el procesamiento de Martín, y también el pedido de excarcelación para el otro detenido en la causa por el encubrimiento. "No fue un crimen, no hubo intención de matar. Fue una desgracia, un trompada a una persona en un hecho vecinal. La persona cae al piso y se murió. Distinto sería si le pegaban en el piso o si lo agarraban entre muchos. Eso no sucedió. Una perito dijo que fue un solo golpe de puño", dijo el abogado Rodrigo González, defensor de Martín. Según aseguró, "Mauro Martín tuvo la eventualidad de estar ahí, y están armando un homicidio con coautores, con encubridores y partícipes necesarios. Mi defendido se presentó, declaró, aclaró y quedó preso. Ahora la Cámara decidirá". Las declaraciones del abogado fueron hechas en las escalinatas de los tribunales de Talcahuano 550 (CABA), donde numerosos periodistas se congregaron en el lunes feriado para cubrir los detalles de la detención del arquero de San Lorenzo. Arrestado en la noche del domingo, Migliore pasó la noche en la sede de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal y fue traslado a los tribunales en medio de un fortísimo operativo de seguridad. A la espera del trámite, sus defensores adelantaron que el arquero no iba a declarar, pero tuvieron estrategias divididas: primero el abogado Matías Morla aseguró que pediría la excarcelación, pero un rato después apareció su colega Víctor Stinfale para decirle a los periodistas que esa idea quedaba descartada de plano frente a un seguro rechazo a la petición. "Voy a obtener una negativa segura y las pruebas se están viendo ahora -dijo Stinfale-. Pablo está mal y va a quedar detenido en una unidad penitenciaria, pero el juez me prometió darle todas las garantías de seguridad. Esto no se va a resolver hoy, seguramente habrá que esperar por lo menos dos semanas".