Diez proyectos de ley que proponen "tolerancia cero" de alcohol al volante en todo el país preocupan seriamente a la vitivinicultura. Representantes del sector aseguran que la aprobación de dichas iniciativas podría provocar caídas de hasta el 30% en el consumo de vino en lugares de botella abierta y no lograría reducir la cantidad de accidentes de tránsito.
No es la primera vez que toma fuerza la discusión por la "tolerancia cero". La medida ya se aprobó en seis provincias (Córdoba, Salta, Tucumán, La Rioja, Neuquén y Entre Ríos) y generó resultados alarmantes para la industria vitivinícola.
Juan Carlos Pina, gerente de Bodegas de Argentina, aseguró que la restricción total de consumo de alcohol para manejar provocó caídas de entre el 20% y el 30% en el consumo de vino en bares y restaurantes de Córdoba y Salta. "Si la prohibición se replicara en el resto del país, seguramente veríamos un impacto similar en la caída de consumo en todas las provincias", indicó.
Lo cierto es que la preocupación de Pina va mucho más allá de esa clase de negocios. De acuerdo a datos difundidos por el Observatorio Vitivinícola Argentino, el consumo per cápita de vino cayó 78% en el país en las últimas cinco décadas. En 1970 se consumían 92 litros de vino por habitante y tras 47 años de caída constante se llegó a un consumo de 20,2 litros per cápita en 2017.
Como queda claro con esas estadísticas, el presente del sector vitivinícola es de por sí preocupante, y según lo entienden los representantes de la industria, si se aprueba la “tolerancia cero” la situación podría empeorar aún más.
Los argumentos
Uno de los puntos sobre los cuales se basan los representantes del sector vitivinícola para oponerse a esta restricción es la experiencia que ha dejado en otros países. Carlos Fiochetta, gerente de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), comentó que "hay muy pocos países que han aplicado tolerancia cero y su nivel de efectividad sobre la reducción de accidentes ha sido realmente muy baja".
Coincidió con esa postura Sergio Villanueva, gerente de la Unión Vitivinícola Argentina (UVA), quien mencionó a modo de ejemplo que "dentro de la Unión Europea, los países con menor cantidad de accidentes son los que mantienen una tolerancia de 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre, similar a lo que rige en la mayoría de las provincias de Argentina".
Por su parte, Juan Carlos Pina señaló que "la mayoría de los accidentes en Argentina que son provocados por el consumo excesivo de alcohol corresponden a conductores que tienen más de 0,5 g/l".
Por otro lado, los voceros del sector apuntaron contra la eficiencia de controles de tránsito. "El problema no es el nivel de alcohol permitido, sino la ineficacia para detectar a quienes violan la restricción actual", protestó Villanueva.
Finalmente, los voceros del sector recordaron que "el vino está asociado al consumo responsable y no forma parte de las costumbres culturales asociadas con el consumo en exceso, como las previas que realizan los jóvenes antes de ir a bailar".