Los smartphones se han convertido en la categoría de dispositivo electrónico más importante de las últimas décadas. Su facilidad de uso, la potencia de su hardware y la capacidad del software han hecho del antiguo celular una imparable computadora, más personal y capaz que nunca.
Si bien distintos métodos se han probado a lo largo del tiempo, la pantalla táctil parece ser el medio que más éxito ha tenido con estos y otros dispositivos. El lienzo en el cual desplazamos nuestros dedos para interactuar con los sistemas tiene la clara ventaja de poder mostrar cualquier interfaz que queramos, sólo tenemos que tocar.
Pero Microsoft quiere llevar esto al siguiente nivel, y está actualmente desarrollando la próxima generación de pantallas táctiles, esta vez acompañadas de un complejo pero sorprendente sistema que adivinará el lugar exacto en donde el usuario pondrá su dedo, pero antes que este lo haga. ¿Cómo lo logran? ¿Para qué serviría?