La deuda que el Gobierno de Mendoza mantiene con la Asociación Unida Transporte Automotor Mendoza (Autam) puede llevar a una reducción de frecuencias, según amenazaron los empresarios del sector. El propio Ministerio de Transporte reconoce que son $ 104 millones los que se deben, aunque los empresarios aclararon que hay otros ítems que se suman y no han sido cuantificados aún.
Esto ocurre en el medio del cierre de la negociación salarial con los choferes, aunque la tramitación de esa deuda sigue su camino por otra vía.
“Hicimos una presentación al Gobierno para mantener el servicio en los horarios de mayor afluencia de pasajeros y restringir las frecuencias nocturnas. Esto no es bueno para nadie, pero desgraciadamente es la manera para ver cómo se puede continuar mientras no paguen lo que deben”, explicó el gerente técnico de Autam, Oscar Razquín, quien remarcó que aún no está definido cuándo se empezará con esa reducción del servicio y que no está cuantificada la deuda oficial desde el inicio de ciclo lectivo por abonos docentes y universitarios en la media y larga distancia.
Es que todavía queda una instancia y es que el Gobierno convoque a todas las partes implicadas y lleguen a alguna solución. En ese sentido, también ayer hubo dos novedades. Por un lado, el ministro Pablo Rousseau comentó a Los Andes que hoy se reunirá con el titular de la cartera de Hacienda para buscar una salida a la situación. Por otro, el secretario general de Sipemom, Rodolfo Calcagni, confirmó que el Gobierno los convocó para tener una reunión el próximo lunes en la Subsecretaría de Trabajo.
“Ayer (por el martes) Autam notificó por mesa de entradas que, en el caso de no tener solución, recurrirán a la reducción de frecuencias nocturnas. Reconocemos que la deuda existe. Los pagos tienen 40 días de atraso. En el caso de que ellos llevaran a cabo esa medida, tenemos autorización para aplicar sanciones. La multa que podemos poner va de $ 3.800 hasta la quita de la concesión. No están autorizados por ley”, advirtió Rousseau.
El sistema de transporte de pasajeros tiene tres fuentes de ingreso: subsidios nacionales, subsidios provinciales y el boleto que paga el usuario (Red Bus). La deuda de la que se habla radica justamente en el dinero que debe pagar el Estado mendocino a las empresas por los kilómetros recorridos.
“Es un problema de los empresarios con el Estado mendocino, no de nosotros”, se desligó Calcagni.
El gremio, por lo pronto, está celebrando el acuerdo paritario que cerró, que trascendió ayer aunque ya pasaron dos semanas desde que se selló. Se trata de un incremento de alrededor del 28,5%. El sindicato aseguró que está conforme con el arreglo porque superó las expectativas.
“Ahora un salario inicial es de $ 15.500. Eso está compuesto por $ 13.117 de básico inicial, más $ 1.000 de 'boletera' y más $ 1.440 por los 24 días que trabaja el conductor. El aumento es retroactivo a enero”, detalló Calcagni.