La vicepresidenta y titular del Senado, Gabriela Michetti, se reunió hoy con los jefes de bloque y consiguió el "consenso" para las medidas de "racionalización" del personal del cuerpo y, en principio, ya se despacharon los telegramas que dan de baja unos 180 contratos que fueron firmados en el último tramo de la gestión de Amado Boudou.
"Hubo un consenso favorable a las medidas de racionalización que se están tomando y el apoyo de los jefes de bloque fue claro y manifiesto", aseguró el secretario Parlamentario del Frente Cambiemos, Juan Pedro Tunessi, en declaraciones a DyN.
La reunión, que se celebró en el Palacio Legislativo, contó con la participación de Michetti, los senadores Miguel Pichetto (Frente para la Victoria), Juan Carlos Marino (UCR), Adolfo Rodríguez Saá (peronismo disidente), Federico Pinedo (PRO), Fernando "Pino" Solanas (Proyecto Sur) y los secretarios Tunessi y Helio Rebot (administrativo).
También en diálogo con esta agencia, "Pino" Solanas aclaró que la reunión fue solicitada por los senadores porque "el 31 de diciembre nos habían bajado de manera salvaje varios colaboradores que venían trabajando con nosotros".
"Todas esas cesantías quedaron sin efecto y Michetti manifestó su necesidad de tener un Senado sin ñoquis"
"Todas esas cesantías quedaron sin efecto y Michetti manifestó su necesidad de tener un Senado sin ñoquis porque el presupuesto de planta se ha duplicado en un año", agregó el cineasta.
De acuerdo a lo señalado por Solanas, "todos los cargos que no tienen que ver con despachos de los senadores van a ser puestos bajo la lupa".
Durante el encuentro se acordó también la incorporación de representantes políticos a la comisión que revisará los 2.035 contratos que Amado Boudou pasó a planta permanente durante 2015 y que fueron dados de baja por la vicepresidenta.
En la primera cumbre con los jefes de los cinco bloques más representativos de la Cámara alta, Michetti obtuvo el consenso político para "trabajar en conjunto en las políticas de racionalidad, transparencia, profesionalización, respeto a la carrera administrativa del personal", según se informó en un comunicado.
Helio Rebot fue el encargado de abrir el debate con un racconto de la negociación con los gremios de los estatales, la situación de los empleados de planta permanente y las medidas que se tomarán hacia adelante para "garantizar la transparencia y sincerar las variables del Senado".
Según explicó Tunessi, en la reunión se acordó que "aquel que trabaja y tiene una función y una tarea va a ser respetado y el que no pueda explicar o no cumpla permanencia en el Senado va a ser dado de baja".
Fuentes legislativas precisaron a DyN que hay 180 personas que ingresaron a planta permanente en el último decreto de Boudou que "no estaban contratados y ni siquiera tenían número de legajo, llegaron desde la calle", graficaron.
De los 2035 contratos dados de baja por Michetti se redujo a 1900 el número de empleados que serán "investigados", ya que se excluyeron a las personas con discapacidad, embarazadas y que se encuentran con tratamiento médico.
Las estimaciones que hacen desde el oficialismo hablan de una cifra de cesanteados que oscilaría entre los 1500 y 1600 empleados, luego de la auditoría que ya realiza la Universidad de Buenos Aires.
Tunessi confirmó que "en una segunda etapa se avanzará en las recategorizaciones y se analizará la situación de los agentes adscrito y 280 personas que están en condiciones de jubilarse".
"Si el número continúa siendo excesivo se pondrá en marcha un programa de retiro voluntario, pero previamente se implementarán normas como, por ejemplo, de control de presentismo", puntualizó el secretario.
Una fuente legislativa apuntó que es "inexplicable" que el Senado tenga más empleados que Diputados y puntualizó que desde 2011, cuando cerró su gestión Julio Cobos, la planta del personal pasó de 3700 a 7000 personas.
Más allá de la disputa por la cantidad de empleados, la fuente aclaró que "probablemente, en una etapa que viene, los senadores tengan que blanquear la dieta".