Después de los fuertes rumores que circularon con la intención de que la Fórmula 1 llegue a Miami, se confirmó que la ciudad estadounidense por presiones externas no podrá organizar un Gran Premio.
Las charlas entre ambas partes parecían muy avanzadas últimamente, pero al parecer el plazo límite para llegar a un acuerdo habría llegado a su fin y una hipotética competencia allí correría peligro.
En mayo se hizo público el voto a favor del ayuntamiento para negociar un acuerdo, fecha límite del cual sería el 1 de julio de este 2018. El plazo finalizó y la subdirectora de comunicaciones de la ciudad confirmó que no se decidió hacer nada por el momento.
El principal problema que se les presentó es donde se haría la carrera, ya que el circuito pasaría por el famoso "Cayo Vizcaíno", un lugar residencial, tranquilo, de lujo, y por algunos parques de la zona, por lo que una asociación de vecinos, ya habría presentado una orden de cese de estos planes, explicando que la carrera cerraría la zona durante casi cuatro meses, más tiempo que un festival de música, del que también se quejan de una manera habitual.
Pero el anhelo de Liberty Media de llevar la Fórmula 1 a la ciudad estadounidense es tan fuerte, que se rumorea que han renunciado al pago habitual de los circuitos para albergar un Gran Premio, el cual estaría valorado en unos 30 millones de dólares.