El consumo interno de vino fraccionado mostró un repunte del 4,9% durante 2019, según lo señalan datos provenientes del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV). En la comparación interanual, en diciembre, la comercialización de este producto mejoró 3,4%.
Los tintos lideraron las tendencias de consumo, en sus diferentes envases, y las preferencias del comprador marcaron el alza en el volumen de ventas que rondó el 7%, en tanto que los blancos sufrieron una retracción del 1,2% respecto del año anterior. En 2019, se comercializaron 8.806.732 hectolitros en total, de los cuales 6.731.214 hl (el 76%) fueron caldos rojos y 2.069.792 hl (23,5) blancos; mientras que 5.726 hl (el 0,1% restante) incumbe a los vinos sin determinar color.
Elecciones en ascenso
El crecimiento anual en la comercialización de vino fraccionado en el mercado interno reafirma la curva ascendente que se mostró en el acumulado enero-octubre, en el que se señaló un crecimiento del 4,2%. En esta línea, los números de diciembre (3,4%) hablan del sexto mes en alza seguida para alcanzar el 4,5% anual de crecimiento en ventas.
Una de las razones de esta expansión se puede explicar por el desempeño del botellón (de hasta 1.500 cm3), que sigue acaparando el mercado interno. El último año se comercializaron 1.395.262 hl en este formato, lo que representó un desarrollo del 36,1% respecto del período 2018. La mejora en la performance en la comparación 2018-2019 también puede encontrar argumentos en la inflación, el aumento de materia prima y el incremento de costos, entre otros motivos que llevaron a las bodegas a subir el precio de sus vinos en los primeros meses de 2018. En aquel momento las ventas en los supermercados cayeron 11%. Los vinos comprendidos en el rango de $ 64 a $ 100 fueron los más afectados, con bajas que llegaron hasta el 23%.
Cuestión de envase
Además de la alta aceptación que mostró el botellón, el Bag in Box logró un crecimiento exponencial, ya que en la comparación interanual manifestó un crecimiento del 50%. Entre enero y diciembre de 2019 se comecializaron 10.768 hectolitros con ese empaque. Este formato de comercialización permite en la gastronomía la venta de copas, brindando una alternativa a la botella de 750 cm3.
En botellas de hasta 750 cm3 se comercializaron 3.384.460 hl, lo que representó un 68,1% del total enbotellado. En la comparación 2018-2019 tuvo una retracción del 1,1%. Por último, el Tetra Brik, logró en 2019 un alza de ventas del 3,4%.
