La cantidad de hectolitros de vino fraccionado comercializados en el mercado externo, entre enero y noviembre, en comparación con el mismo período de 2018, creció 3,5%. El vino a granel tuvo una variación más significativa: las ventas en el exterior crecieron 21,3%. Sin embargo, los precios cayeron, ya que pese a esta suba, ingresó 7,7% menos de dólares que el año pasado.
El informe de la comercialización de vinos y mostos en el mercado externo, durante noviembre, elaborado por el Instituto Nacional de Vitivinicultura, muestra que de enero a este mes de 2019 la venta de vino tinto fraccionado aumentó 4,2%, mientras la de blanco decreció 0,1%. En tanto, la de vino a granel de color se incrementó 135,9% y la de blanco, se redujo 36,2%. La de mosto concentrado subió 33,6%.
Sin embargo, en los 11 meses de 2019, el valor FOB total de las exportaciones de vinos cayó un 1,8% en la comparativa interanual, con un -9,3% en los genéricos, un -0,8% en los varietales y un -12,8% en los espumosos. De hecho, el precio medio del vino pasó de 2,97 dólares por litro en noviembre de 2018 a 2,37 dólares en el mismo mes de 2019.
Patricia Ortiz, presidente de Bodegas de Argentina, indicó que la caída en dólares con incremento de hectolitros se explica en parte por el aumento en los volúmenes de granel exportado, pero también porque las bodegas aceptaron, para ganar en cantidades vendidas, reducir el precio y vender en segmentos más bajos, que son lo que tienen más rotación que las cajas de mayor valor.
Asimismo, mencionó que Estados Unidos ha experimentado una cierta recesión y los vinos españoles ingresan de modo más agresivo, y que Inglaterra, que es un mercado que venía creciendo, se ha frenado por el Brexit. Ortiz indicó que para hacer frente a este carácter dinámico se debe reforzar la promoción, ya que la inversión en este sentido viene disminuyendo y esto repercute de modo lineal en las ventas. Así, aunque Argentina cuente con vinos de muy buenos puntajes, "hay que llegar al consumidor y contárselo".
El gerente de la Unión Vitivinícola Argentina, Sergio Villanueva, planteó que, en realidad, Argentina exporta volúmenes similares desde 2011 y consideró que se le debe prestar especial atención a que se está vendiendo al exterior con valores de uva y de vino por debajo de la sostenibilidad del sector. En el contexto de un mercado internacional muy competitivo, que el país no pueda mejorar los precios para no perder exportaciones, debería, en su opinión, llevar la atención a incrementar la competitividad.
Nicolás Vicchi, subgerente de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Acovi), detalló que dos circunstancias explican esta baja en el valor FOB de las exportaciones de vino. Por un lado, en los productos de alta gama, las bodegas han desarrollado estrategias comerciales de promoción para poder mantener mercados.
Por otro, el tipo de cambio actual ha permitido que se ingrese a un segmento de entrada (entry level) en el que, para poder competir, principalmente con Chile, se debe tener un precio en dólares igual o menor al de ellos. El tener presencia en esta franja, señaló, implica una oportunidad de sacar mayor volumen -y con ello excedentes-, pero también obliga a sostener un valor de venta que al productor primario le resulta insuficiente.
