Pasados los primeros meses de gestión del presidente Mauricio Macri, el sector empresario mendocino mantiene su voto de confianza con vistas al 2017, pero percibe un entorno muy complicado para los próximos meses.
Según un informe realizado en febrero por el Centro de Información de la Federación Económica de Mendoza (Cifem) en conjunto con la Universidad Champagnat, los empresarios locales anticipan caída de ventas, aumento de costos y pérdidas de puestos de trabajo.
El lado positivo es que las intenciones de inversión vienen en crecimiento, lo que a los ojos de los expertos es una señal de confianza respecto a los resultados que dejará el paquete de medidas macroeconómicas tomadas en los primeros meses del macrismo.
Corto plazo delicado
Los resultados obtenidos por Cifem en la encuesta de expectativas muestran concordancia en el pensamiento de los empresarios.
Una de las respuestas más contundentes se dio en lo referido al empleo. El 45% de los empresarios reconoció que considera disminuir su planta de empleados en los próximos cuatro meses, mientras que un 45% aseguró que la mantendrá constante. El 10% restante está dividido entre un 2% que va a reducir drásticamente el personal y un 8% que, por el contrario, va a hacer algunas contrataciones.
El dato más llamativo dentro de la consulta sobre empleo es que el 45% de las empresas consultadas está pensando en hacer algunos despidos. Ese resultado marca un cambio de tendencia claro, teniendo en cuenta que en una encuesta de expectativas realizada en diciembre de 2015, solo el 13% de los empresarios hablaba de disminuir su planta de personal.
Un detalle a tener en cuenta es que como las empresas fueron consultadas en febrero pasado, parte de ese 45% que planeaba despedir personal, ya lo hizo entre marzo y abril.
Las expectativas de ventas también evidencian un presente complicado para el sector empresario. Según el informe de Cifem, la mayoría de las empresas consultadas anticipa que sus ventas caerán moderadamente. El 36% dio esa respuesta, mientras que un 31% apuesta a que sus ventas se mantengan constantes y solo un 29% considera que tendrán un “crecimiento moderado”.
Es importante destacar en este punto que gran parte de las empresas consultadas pertenecen al sector comercial, uno de los rubros que más está sufriendo del escenario recesivo.
En lo que respecta a precios y costos, las expectativas de los empresarios son también bastante negativas. Apenas un 15% de las empresas consultadas piensa que sus costos se mantendrán constantes, mientras que un 30% considera que subirán significativamente y un 53% que aumentarán de forma moderada.
En sus encuestas, los empresarios dieron a entender que esas subas de costos se trasladarán de forma inmediata a los precios de sus productos y servicios. En diciembre pasado, solo el 3% de los encuestados pensaba que sus precios subirían significativamente, pero en esta oportunidad el 22% respondió que el valor de sus productos tendrá incrementos considerables. Además, el 53% tiene expectativas de que sus precios suban moderadamente y apenas un 22% aseguró que se mantendrán constantes.
La lectura del ajuste
Expertos consultados por Los Andes aseguraron que las expectativas de los empresarios son el reflejo de un marcado período recesivo. El economista Sebastián Laza explicó que "Mendoza está atravesando una recesión muy fuerte por causa de los ajustes realizados por el Gobierno Nacional".
“El principal problema es que la devaluación, las quitas de subsidios y las subas de las tarifas han provocado que los precios suban más que los salarios durante el primer trimestre. Esa situación llevó a una lógica baja del consumo y a las malas expectativas del sector empresario”, indicó.
“Con costos crecientes y ventas en baja, es entendible que algunos empresarios piensan en achicar su planta de personal. No hay que olvidar que muchas de las empresas consultadas pertenecen al rubro comercial, en el cual las altas y bajas de empleados son sencillas en comparación a otros sectores”, señaló Laza.
Jorge Day, economista de Fundación Mediterránea, coincidió con esa lectura y sumó un segundo factor condicionante de la recesión. “A la pérdida del poder adquisitivo de los salarios hay que agregarle la delicada situación financiera del Gobierno de Mendoza y del Nacional. Un Estado con mayores recursos podría ayudar a traccionar la economía, pero este no es el caso”, observó Day.
Economistas expertos de la Cifem sumaron su palabra y recordaron que el estudio está enfocado en las expectativas que tienen los empresarios para los cuatro meses siguientes. “Las encuestas fueron realizadas en febrero, un momento en que se oficializaba la suba de tarifa eléctrica y se anunciaba la del gas”, comentaron.
“Las medidas macroeconómicas tomadas por Mauricio Macri son procíclicas. Es decir que han estado apuntadas a aumentar la recesión y no a revertirla. Por eso las empresas han empeorado sus expectativas en todos los aspectos”, explicaron.
Mejoró la confianza
Aunque parezca paradójico, las empresas consultadas por Cifem mejoraron su confianza en el Gobierno en la última encuesta.
Cada dos meses la FEM mide el Índice de Confianza Empresaria (ICE), que se elabora, entre otros puntos, en las intenciones de inversión.
En la última encuesta de expectativas el ICE fue de 38 puntos sobre un máximo de 100.
Economistas de Cifem señalaron que “es un valor bajo acorde a una economía recesiva”, pero destacaron que la confianza mejoró respecto a los 32 puntos medidos en la encuesta anterior (diciembre de 2015).
“Se ve un cambio de tendencia. La confianza recién se está reconstruyendo, pero es positivo que a pesar de la profundización de la recesión se estén considerando algunas inversiones a futuro”, comentaron desde la Cifem.
Sebastián Laza también mostró una mirada optimista al respecto. “Los empresarios saben que la recesión es consecuencia de un ajuste retrasado que resultaba necesario. Por primera vez en mucho tiempo se están encarando los problemas de fondo, como la inflación y el déficit fiscal. Son acciones muy bien vistas que deberían tener resultados favorables a futuro”, apuntó el economista.
Jorge Day opinó que “la mejora en las expectativas de inversión demuestra que las empresas mantienen una actitud positiva ante las subas de costos y la baja de ventas”.
“Las empresas entienden por qué la economía está atravesando un período recesivo y mantienen esperanzas en que la situación mejore en el mediano y largo plazo”, agregó.
Para los economistas que estuvieron a cargo de las encuestas, esa confianza podría crecer con la resolución del conflicto con los holdouts.
“Las pymes no se verían directamente favorecidas con la apertura del financiamiento externo, pero se podrían recuperar créditos para la obra pública y el Gobierno podría dejar de compensar el déficit fiscal con emisión monetaria. De ser así, podría empezar a bajar la inflación”, aseguraron desde Cifem.
Jorge Day coincidió en la importancia de la resolución del conflicto con los holdouts y agregó como factor decisivo “la posible mejora del sector exportador”.
Esperan más días difíciles
Desde la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM) y el Consejo Empresario Mendocino (CEM) compartieron sus expectativas en relación al escenario económico y brindaron una visión más allá de los próximos cuatro meses.
Daniel Ariosto, presidente de la UCIM, habló de “un primer semestre complicado”, pero se mostró comprensivo con las medidas tomadas por el nuevo gobierno. “Tanto a nivel nacional como provincial los funcionarios encontraron un país complicado. Por eso entendemos que el ajuste era más que necesario”, comentó.
Ariosto reconoció que “el sector empresario en general se prepara para un período con caída de ventas” y confirmó que “podrían haber algunos despidos en diferentes rubros”.
Sin embargo se mostró optimista en vistas al 2017 y depositó un voto de confianza en los funcionarios nacionales. “El segundo semestre va a ser muy complicado, pero estamos en buenas manos”, declaró.
Por último, el presidente de la UCIM mostró enojo por la decisiones tomadas por otros empresarios. “Las grandes empresas que tienen incidencia en la economía han traicionado a Macri. Para que se logre un crecimiento real será necesario que se dejen de aumentar precios de forma desmedida”, reclamó.
Federico Ostropolsky, presidente del CEM, tiene una postura similar. “Estamos en un período de transición que será muy duro. Las medidas drásticas que se tomaron eran necesarias, más allá de si se hacían de forma gradual o directa. Ahora deberemos enfrentar las consecuencias y preparar el terreno para mejorar en el 2017”, opinó.
Más allá de su mirada positiva, Ostropolsky fue muy cauto a la hora de hablar de crecimiento. “El derrame de las inversiones será lento y tardará años en verse. Primero debemos estar atentos a lo que ocurra con las empresas que ya están instaladas en Mendoza y en el resto del país. El Gobierno deberá encontrar la forma de reactivar la economía”, concluyó.