Los shoppings o grandes centros comerciales, también denominados "catedrales del consumo", junto a los centros de compras, se expanden con fuerza por distintas zonas de la provincia y ya son 7 los que están funcionando, según dato del Centro de Empleados de Comercio (CEC).
En el país suman 108 complejos y para los dos próximos años se prevé la construcción de 20 nuevos proyectos en Argentina, muchos de los cuales han colocado a Mendoza en su mira.
Pero, ¿hay suficiente mercado comercial para estos emprendimientos? Según los referentes del sector, la respuesta es en su gran mayoría afirmativa.
"La actividad de centros comerciales es muy joven en Argentina, con 25 años desde la creación del primer centro comercial. Esto hace que la penetración en el mercado de retail esté en porcentajes aún bajos en relación a otros países. En nuestro país los centros comerciales participan en un 18% de la venta minorista; mientras que en otros de la región, los ratios son más altos, por ejemplo en Chile es del 23% y Brasil 31%, lo que indica lo mucho que queda por hacerse aún. Esto sin llegar a comparaciones con países con mayor desarrollo, como Estados Unidos y Canadá, donde los shoppings absorben más del 60% de las ventas minoristas", subrayó Diego Lago, del Mendoza Plaza Shopping.
Más allá del ejemplo en otras tierras, lo cierto es que en Mendoza, su población no tuvo un cambio sustancial en el crecimiento demográfico. Según los datos del Censo 2010, la población creció apenas 9,4% con respecto al censo 2001.
Sin duda en este esquema de nuevos emprendimientos comerciales un rol de relevancia se lo llevan las políticas económicas impulsadas a lo largo de la década "K". La presidenta Kirchner, para alimentar y hacer crecer el consumo interno, desgranó a lo largo de los años de su gobierno desde planes de créditos para jubilados y distintas políticas que tenían como objetivo incentivar el consumo masivo. Así el flujo del dinero hacia la economía familiar hizo que las ventas subieran (hasta que la inflación comenzó a molestar) y los emprendimientos comerciales comenzaron a expandirse.
Para los entrevistados, la clave de diferenciación comercial en la abundancia de oferta, está cada vez más en saber elegir la ubicación y ofrecer servicios diversificados. Es por eso que la mayoría de las iniciativas se ubica en zonas de expansión habitacional y busca evitarles a los consumidores el traslado.
Según datos aportados por la Cámara Argentina de Shopping Center, el sector factura anualmente cerca de 12 mil millones de dólares y da trabajo de manera directa e indirecta a 45 mil personas. En Mendoza, de acuerdo al CEC, los 7 proyectos en funcionamiento, esto es, el Mendoza Plaza Shopping, Palmares Open Mall, La Barraca, Alto Dorrego, Portal Los Andes, Paseo Stare y Shopping Libertad, dan trabajo a 1.865 mendocinos.
"Exceptuando los patios de comidas, el Mendoza Plaza Shopping emplea a 950 personas, Palmares Open Mall 370, Portal Los Andes 310 trabajadores, La Barraca 120, Shopping Libertad 70, Alto Dorrego 25 empleados y finalmente los 20 trabajadores de Paseo Stare", señaló Guillermo Pereyra, del CEC.
Los shoppings, que agrupan principalmente a locales de indumentaria y calzado, y que incorporan ofertas gastronómicas, de entretenimiento y servicios, surgieron en la Argentina en 1987, en Avellaneda, en la provincia de Buenos Aires. En su definición pueden ser de gran formato, como el Mendoza Plaza Shopping, o bien de cercanía instalados a la vera de las rutas, como el caso de Paseo Stare, por el puente Olive. El mínimo de locales comerciales que debe tener un shopping para no ser considerado galería comercial son 20.
A la hora de diferenciarse, algunos dividen aguas. Según Germán Campoy, de Lomas Plaza, un shopping o mall reúne en un mismo espacio la oferta de entretenimiento como cines y restaurantes, junto a locales de indumentaria y accesorios hasta bancos, farmacias y centros de atención médica.
"En nuestro caso no somos aún un mall. Nos consideramos un centro de servicios, una plaza comercial. Nuestro centro abastece no sólo a los vecinos de Dalvian, sino también a los barrios vecinos como Sanidad y Champagnat. Tenemos gastronomía, fiambrería, vinoteca, salón de belleza, de cuidado de uñas. En el 2014 vamos a incorporar unos 12 locales de ropa y óptica", afirmó Germán Campoy, de Lomas Plaza.
Con apenas unos días de nacido a la vida comercial, el centro de servicios en pleno Challao busca su propio nicho de mercado y afirman que su propuesta comercial es complementaria a la que existía en la zona.
"En nuestros análisis para invertir nos basamos en el estudio hidrológico de Aysam Aguas Mendocinas, y las obras que tienen proyectadas en la zona, así como también estudiamos la afluencia de autos que posee el Challao", remarcó Campoy.
Pujas a la vista
La actual presencia comercial de los shoppings y paseos de compras, como así también los inminentes arribos ubicados en el Gran Mendoza, no son bienvenidos por una parte del empresariado local nucleado en la Cámara Empresaria de Comercio, Industria, Turismo y Servicios de Mendoza (Cecitys).
"Nuestra provincia no posee escala para tantos malls. En el país somos 40 millones de habitantes que parte de su consumo lo direccionan a los 108 shoppings, eso da una media de 357 mil habitantes por mall. Con los tres shoppings de la provincia y los dos más chicos que poseen Jumbo y Walmart estaríamos en la media nacional; ya está el mercado maduro. Y si se concretan emprendimientos como el supermercado Coto de calle Perú, la obra del Pozo Maristas, de calle San Martín, y Alto Norte, de calle Regalado Olguín, Mendoza estará saturada. La provincia no posee el nivel de consumo para absorber tantos proyectos comerciales", remarcó Minzer.
Alianzas establecidas
El negocio del shopping se basa en que los propietarios del emprendimiento alquilan los locales a los comerciantes y además del alquiler perciben un porcentaje de las ventas. Los inquilinos deben pagar las expensas del local y también tienen que aportar a un fondo de promoción.
"A pesar de que los bancos redujeron sus descuentos, que pasaron de un promedio de 25-30% a 15-20%, las ventas con precios rebajados y financiados siguen atrayendo a la gente", estimó el gerente de la Cámara Argentina de Shopping Centers, Mario Nirenberg.
Por cierto, la alianza entre shoppings y bancos produce heridas sobre el resto de los comercios en Mendoza.
"No peleamos con las mismas armas que los malls. Hay entidades financieras que fijan condiciones diferentes para los shoppings, en tanto el resto de los negocios tenemos otro esquema de participación en los descuentos que es más desfavorable", resaltó Susana Cavallaro, miembro del directorio de Cecitys.
Tampoco es favorable, según la empresaria, la política de contratación del personal.
"Como poseen turnos compensatorios con francos, no pagan el doble del salario los días feriados, ni fines de semana. En cambio, en nuestro caso la jornada laboral los días domingos y feriados la tenemos que pagar el doble", detalló Cavallaro.
Los que ganarán
Si se analiza cada shopping, surgen algunos signos distintivos. A la hora de su elección, y según Lorena Pérez, de Portal Los Andes, la ubicación, si posee o no un supermercado aledaño, el espacio y la limpieza, son elementos que cuentan a la hora de fidelizar los clientes.
"En nuestro caso, si bien estamos cerca de La Barraca tenemos una tienda ancla, como es Jumbo y también Easy. La gente busca cada vez más comodidad, mayores servicios, limpieza y seguridad, el saber que pueden hacer sus comprar sin temores a robos, ni de su auto ni de su mercadería. Las nuevas propuestas de shoppings generan más visitas, pero luego la gente vuelve a los espacios que les ofrezcan mayores servicios y comodidades. El mendocino es conservador, le cuesta adaptarse a lo nuevo", apuntó Lorena Pérez, de Portal Los Andes.
Desde La Barraca, Gonzalo Pérez Bernal, dijo que 2013 es un año en el que aún la estructura espacial seguirá expandiéndose, y el shopping es un formato comercial atractivo para los ciudadanos. "En Mendoza, al igual que en otras ciudades, su gente privilegia los espacios donde pueda consumir un gran número de servicios", explicó Bernal. En su visión augura larga vida comercial para los malls de la provincia.
Las estrategias son variadas, algunas superficies comerciales buscarán tener la oferta gastronómica más completa, en otros casos serán los servicios profesionales, los centros médicos y las instalaciones. Otros consideran que su fortaleza será la ubicación, lindante a barrios poblados o en los mismos complejos habitacionales privados.
Lejos de la concentración en un mismo punto del mapa, los inversores, conocedores de que al mendocino le gusta tener todo al alcance de la mano y estacionar en la puerta, están multiplicando las propuestas para que así sea. El año que viene nuevos emprendimientos poblarán la geografía mendocina.
