"Este Día Internacional de la Mujer la tierra tiembla", bramó desde el escenario montado frente a la Legislatura provincial una de las oradoras de la multitudinaria marcha de mujeres que recorrió las calles del Centro de Mendoza. Y tembló con el paso de unas 6.000 personas por las arterias mendocinas.
Mujeres organizadas en sindicatos y gremios, trabajadoras, amas de casa, estudiantes e integrantes del movimiento "Ni Una Menos" se congregaron esta tarde en el nudo vial de Vicente Zapata y Costanera para adherir al paro internacional de mujeres y reclamar por sus derechos.
Más allá de las consignas particulares de cada grupo, las manifestantes se unieron en un grito común: "¡Vivas nos Queremos!" para reclamar el fin de la violencia de género y exigir igualdad de oportunidades en todos los ámbitos.
Con intervenciones artísticas montadas por miembros de agrupaciones feministas en plena marcha y con el resonar de bombos, redoblantes y murgas, las banderas de distintas organizaciones políticas y sociales se mezclaron. La concentración se realizó a las 18 en el nudo vial. De allí la inmensa columna marchó por Vicente Zapata, provocando el corte total del principal ingreso a la Ciudad. De allí, los manifestantes continuaron marchando por avenida España hasta Virgen del Carmen de Cuyo.
Tras una breve parada frente al Palacio del Poder Judicial y una movilizante intervención en la voces de quienes encabezaban la marcha, la movilización continuó por Patricias Mendocinas. El grito "Ni una menos, vivas nos queremos" inundó las gargantas de las miles de mendocinas que marchaban y de las que se paraban en cada esquina a observar el paso de la marea humana.
Ya a las 20, la columna principal llegó al cruce de Patricias y peatonal Sarmiento. Allí un escenario montado sobre la vereda aguardaba a los manifestantes, mientras se acomodaban sobre la calle y un puñado de policías las observaba desde la explanada de la Casa de las Leyes.
Entonces la referente de Madres de Plaza de Mayo, María Domínguez, tomó la palabra. "No puede ser esto que está pasando. Los hombres que matan a las mujeres ni siquiera piensan en sus hijos, que quedan huérfanos. Esto no se puede tolerar. La lucha tiene que continuar", enfatizó. La multitud aplaudió su discurso.
Luego fue el turno de la madre de uno de los alumnos del Instituto Próvolo de Luján. "Curas pedófilos hicieron una asociación para abusar de nuestros hijos. Todavía hay muchos cómplices y las víctimas no tienen el apoyo que necesitan de parte del Estado", denunció la mujer.
A ella le siguió un par de oradoras que leyó un manifiesto firmado por las más de 50 organizaciones que conforman la asamblea Ni Una Menos en Mendoza. Interrumpido a veces por aplausos y gritos de apoyo, el documento exigió el fin de la violencia de género, la asistencia a las víctimas de parte del Estado, cupo laboral trans y el aborto legal y gratuito.
Otros reclamos más coyunturales se incluyeron en el manifiesto. Entre ellos, el pedido de renuncia del titular de la DGE, Jaime Correas, y de funcionarios acusados por violencia de género, la liberación de Milagro Sala, la expulsión de la Suprema Corte de Justicia de José Valerio y el fin del “concurso de belleza de Vendimia” porque “cosifica a la mujer”.
Luego de los discursos llegaron shows artísticos que pusieron el cierre a la multitudinaria manifestación.