Este jueves se dio a conocer el fallo de la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito (federal) sobre la causa Moshe Marcel Ajdler. La sentencia concuerda con la emitida en 2017 por un juez de Nueva York y con el criterio decidido en marzo de este año por la Corte de Apelaciones del Estado de Nueva York, dándole la razón a la provincia de Mendoza.
En lo esencial consideró que una vez vencido el plazo para reclamar el capital adeudado, no existen bases legales para reclamar los intereses. La sentencia sienta precedente, no sólo para la provincia sino para el país y otros deudores con reclamos similares.
De esta manera y al confirmarse la decisión de primera instancia, no hay lugar al reclamo de 7 millones de dólares más intereses contra la provincia, por encontrarse prescripta la deuda. Así Mosche Ajdler no podrá reclamar ni capital ni intereses por los bonos que posee.
Los defensores de Mendoza fueron el Fiscal de Estado, Fernando Simón, y los ministros de Gobierno Lisandro Nieri y Dalmiro Garay (hoy miembro de la Corte Suprema de Justicia).
Los bonos
En 1997, la Provincia emitió títulos de deuda en el mercado internacional ("Bono Aconcagua 2007") por 250 millones de dólares, en un solo vencimiento a los 10 años, es decir, con vencimiento en 2007, con intereses pagaderos semestralmente hasta el vencimiento.
En 2004 se reestructuraron esos títulos, mediante una operatoria de canje que consistió a grandes rasgos en dar de baja los títulos emitidos bajo la denominación "Bono Aconcagua 2007", entregando a cambio los títulos de deuda denominados "Bono Mendoza 2018".
La operatoria de canje culminó en 2008. Sin embargo, quedó un remanente de títulos sin canjear correspondientes al "Bono Aconcagua 2007" por la suma aproximada de U$S 10.000.000.
En septiembre de 2018 y luego de 21 años de contraída la deuda, el gobierno de Alfredo Cornejo pagó la última cuota del bono nacido durante el mandato de Julios Cobos.
Sin embargo, en ese momento aún queda una parte pendiente: 10,5 millones de dólares que no entraron al canje del 2004.
De ese remanente, se inició la demanda de un tenedor particular, Moshe Marcel Ajdler, por 7 millones de esos 10,5. El abogado del demandante envió en agosto y noviembre de 2016, dos cartas a la provincia en las que reclamaba la totalidad del capital de los bonos emitidos por la Provincia en 1997 ("Bono Aconcagua 2007"), además de los intereses devengados por esos Bonos, lo que daba un total aproximado de 23 millones de dólares.
Con este fallo, el capítulo parece haber finalizado para Mendoza.