Si bien en el Ejecutivo provincial no se entusiasman demasiado, el cambio de signo político nacional ha favorecido a Mendoza.
Es que la llegada de fondos federales ha permitido posicionarla en un notable quinto puesto sobre el total de provincias que han conseguido ayuda desde el gobierno de Mauricio Macri.
Esto, sobre todo si se tiene en cuenta que en la gestión anterior, con fondos coparticipables y discrecionales, Mendoza aparecía más cerca del puesto 20 entre 24 estados provinciales.
En los primeros siete meses de gestión de Cambiemos, a Mendoza llegaron $ 2.035 millones, entre adelantos de coparticipación, aportes del tesoro nacional (ATN) y pagos de vivienda y de obra pública, entre otros conceptos.
Sólo tiene por delante a la provincia de Buenos Aires ($ 5.115 millones), que conduce la macrista María Eugenia Vidal; a Jujuy ($ 2.483 millones), gobernada por el radical Gerardo Morales; a Neuquén ($ 2.306 millones), que dirige Omar Gutiérrez del Movimiento Popular Neuquino, y a Entre Ríos ($ 2.250 millones), a cargo del peronista Gustavo Bordet.
Un artículo aparecido en el diario porteño La Nación da cuenta de esto e incluso señala que el macrismo tiene preferencias con los distritos gobernados por Cambiemos.
En ese sentido, ubica a los bonaerenses, a Jujuy, a Mendoza pero también a Corrientes (con apenas $ 210 millones de fondos nacionales) y Ciudad de Buenos Aires (con sólo $ 162 millones).
En ese contexto en efecto, las provincias administradas por Cambiemos obtienen el 41% de los $ 24.131 millones que el Ministerio del Interior entregó a todas las provincias en este tiempo. Y entre ellas, Mendoza se ubica tercera en las preferencias, detrás de Buenos Aires y Jujuy.
Del resto, el 32% de los fondos nacionales fue a las 10 provincias gobernadas por el Frente para la Victoria; 17,5% para las cuatro que gobiernan partidos locales y 9,5% para las cinco que gobierna el peronismo no relacionado con el FpV.
Sin embargo, está claro que hay administraciones no oficialistas que también han recibido fuertes beneficios, como el caso de Neuquén, gobernada por el MPN, y Entre Ríos, con gestión del FpV.
Así las cosas, Mendoza recibe el 8,8% de toda la plata que va de la Nación a las provincias, cuando Buenos Aires obtiene casi el 30% de ese total.
Pero entre las cinco oficialistas, Mendoza logra el 20% de los $ 10.005 millones que van a esos cinco distritos. Buenos Aires se queda con más del 50% de esos fondos y Jujuy, el 24,8%. Corrientes y Ciudad de Buenos Aires sólo obtienen 2,1% y 1,6% respectivamente en este exclusivo grupo, cuyos exiguos montos son unos de los más bajos de todo el país.
De hecho, la Capital está penúltima, sólo adelante de San Luis, que recibió apenas $ 70 millones en estos siete meses.
Los fondos mendocinos
Para el Gobierno mendocino “no hay preferencias nacionales” con Mendoza. Así lo dio a entender el titular de Hacienda, Martín Kerchner.
El ministro basa esa interpretación en el hecho de que de los $ 2.035 millones mendocinos, $ 1.800 millones se lograron como adelantos de coparticipación y tienen que devolverse, aunque se trató de un “auxilio” que permitió zafar de situaciones críticas.
Efectivamente, $1.000 millones llegaron en enero y “sirvieron para pagar sueldos de enero y febrero”, confirmó Kerchner. Los otros 800 millones ayudaron “a pagarles a los proveedores”.
“De esos adelantos, ya se devolvieron casi 280 millones”, informó también el ministro.
En el caso de los ATN, que pueden considerarse discrecionales, “Mendoza sólo recibió 5 millones cuando a todas las provincias han llegado 901 millones”, destacó Kerchner para descartar preferencia.
Algo similar opinó sobre los fondos de obra pública. “e han entregado 9.500 millones, pero a Mendoza sólo llegaron $ 300 millones”, dijo.
En ese sentido, defendió el reparto. “Mendoza fue ayudada en un momento trágico de sus finanzas. Pero también se ha ayudado a provincias de otros colores políticos. El Gobierno nacional ha sido criterioso”, resaltó.
