Con la presencia de varios jugadores mendocinos, la selección argentina obtuvo seis medallas en el Campeonato Sudamericano Buenos Aires 2019, con una de oro, una de plata y cuatro de bronce.
De esta manera, nuestro país quedó segundo en la tabla general, detrás de Chile.
En detalle, la única medalla de oro se obtuvo en la prueba de equipos masculino. Nuestro representativo estuvo integrado por el mendocino Gastón Alto, Nicolás Galvano, Pablo Tabachnik y Martín Bentancor.
El otro gran logro alcanzado por el combinado nacional fue la medalla plateada para el dobles integrado por los mendocinos Francisco Sanchi y Santiago Lorenzo. Asimismo, este último se destacó en la prueba individual tras alcanzar la medalla de plata en individual mayores, lo cual habla de la proyección del jugador sanrafaelino quien con apenas 18 años, ya está instalado entre los mejores jugadores del continente.
Los terceros puestos: equipo femenino (Ana Codina, Camila Argüelles, Paula Fukuhara y Agustina Iwasa); individual mayores, Lorenzo; individual sub 21, Bentancor, y dobles mixtos, Argüelles y Galvano.
La figura mendocina, con dos medallas
Santiago Lorenzo cerró, según sus propias palabras, "un muy buen torneo" Sudamericano, con dos medallas: una de plata, en dobles con Francisco Sanchi, y otra de bronce, en individuales.
“Por ahí no empecé (el torneo) muy bien. Tengo la bronca de sub 21 (perdió en octavos con Martínez, 2-3), pero lo que hicimos en dobles e individual hizo que los otro quede de lado y sea un muy buen torneo".
En la prueba individual, con el ecuatoriano Miño –quien luego se coronó campeón sudamericnao- el juvenil argentino comenzó ganando el partido 2-0, con parciales de 12-10 y 15-13. A partir del tercero, el ecuatoriano fue imparable: 3-11, 9-11, 4-11, 8-11 para el 2-4 final.
Contra Moya y Martínez, nuestros jugadores comenzaron abajo, 9-11, se pusieron en ventaja 12-10, 11-9; el cuarto fue para los chilenos 7-11, y el cierre fue más tranquilo, 11-3.
La final fue muy simlar, pero con suerte en contra: primero abajo, 9-11, el segundo y tercer set, 11-8, 11-7, y los últimos dos, 11-7, 11-8.
A pesar de los resultados, en esta última jornada del "Suda" se vio, quizá, la jugada del campeonato: un golpe por detrás de la espalda y punto contra Miño; un lujo argentino para que recorra el mundo.
Más allá del respeto, y sabiendo que jugaba un torneo internacional de mayores, el juvenil confiaba en que podía tener un buen torneo. Y así lo hizo, cumpliendo con creces.