El gobernador Alfredo Cornejo aceptó ayer desistir de dos juicios iniciados por Mendoza a la Nación, por lo que la provincia recibirá compensaciones con bonos a pagarse en once años, arrancando en 2018 con el equivalente a unos 250 millones de pesos y el resto, en 10 cuotas anuales de 500 millones de pesos actualizadas por inflación.
Ése fue el resultado para Mendoza del histórico Pacto Fiscal que firmaron ayer en la Casa Rosada el presiente Mauricio Macri y las provincias, excepto San Luis que no aceptó las condiciones dado que ya cuenta con sentencia firme de la Corte Suprema.
En primer lugar, Cornejo aceptó ir a la Corte Suprema para retirar la demanda que inició allí contra el Estado nacional para que se le reintegre el 15% de coparticipación anual que era destinado a la Anses.
Mendoza reclamaba a la Nación unos 8.000 millones de pesos pero la administración de Mauricio Macri gatillará unos 250 millones de pesos en bonos en 2018 y, a partir de allí, 500 millones de pesos extra también en títulos públicos durante los 10 años siguientes. Este dinero se ajustará por inflación.
El segundo de los juicios iniciados por la provincia a la Nación es por más fondos de la Coparticipación Federal. Entre 1999 y 2003, los recursos que venían desde la Rosada representaban entre el 32% y el 45% del total de los ingresos de la provincia; ahora, sólo el 28%.
Después de Buenos Aires, Mendoza es la segunda provincia más afectada por la actual coparticipación, por lo que Cornejo volvió a pedir ayer ante Macri y el resto de los gobernadores comenzar el debate por un nuevo sistema distributivo.
Al salir de la Casa Rosada, el gobernador expresó que “es sano para la construcción de la nueva Argentina bajar la litigiosidad” entre los Estados nacional y provinciales.
El reclamo de Cornejo tuvo eco: se acordó consensuar una nueva ley de coparticipación que esté basada en las competencias, servicios y funciones de cada jurisdicción, contemple criterios objetivos de reparto y logre las metas de solidaridad y equidad.
“Este consenso fiscal era el paso que necesitábamos para dar inicio al diálogo postergado desde 1994 para una nueva Coparticipación”, respondió el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, a una consulta de Los Andes en la Casa Rosada.
El Pacto Fiscal alcanzado ayer servirá para bajar la presión tributaria sobre la actividad económica y reordenar la transferencia de recursos en la transición hacia la nueva ley que Cornejo pide desde que asumió en diciembre de 2015.
Tras una áspera negociación que al promediar la semana parecía ir hacia el naufragio, el presidente Mauricio Macri y los gobernadores pusieron la firma el entendimiento que demandará la modificación de varias leyes entre diciembre y junio de 2018.
En primer lugar, las provincias se comprometieron a bajar “impuestos distorsivos”, como Ingresos Brutos y Sellos, por el equivalente al 1,5% del Producto Bruto Interno en los próximos cinco años.
Asimismo, acompañarán la Ley de Responsabilidad Fiscal, para atar el crecimiento del gasto público a la pauta de inflación que informe el Indec. Eso hará que el gasto se mantenga constante en términos reales durante los próximos años.
La Nación compensará con recursos propios a Buenos Aires por el reclamado Fondo del Conurbano: 40.000 millones de pesos en 2018 y 65.000 millones en 2019. María Eugenia Vidal bajará la demanda en la Corte Suprema por 400.000 millones de pesos.
Se derogará el artículo 104 de la Ley de Ganancias: ahora todos los recursos que genere este impuesto irán a las provincias.
Además de Cornejo y con la excepción del puntano Alberto Rodríguez Saá, los gobernadores aceptaron desistir de los 59 juicios contra el Gobierno nacional, por un monto de 340.000 millones de pesos. El Gobierno emitirá un bono de 80.000 millones de pesos como compensación a las provincias.
Además, otro de los puntos del Pacto Fiscal indica que se coparticipará el 100 por ciento de la de revalúo impositivo, de lo que se recauda por Ganancias y el total del Impuesto al cheque hasta su desaparición en 2022.
El Pacto también contempla que el régimen previsional registre modificaciones para dar mayor sustentabilidad a la Anses. Los haberes aumentarán por inflación más un plus, de forma trimestral; se pagará el 82% del salario mínimo vital y móvil a los que aportaron 30 años y se eliminarán las jubilaciones de privilegio. (Ver página 4)
El Gobierno nacional se comprometió a financiar los déficits de las cajas previsionales no transferidas por trece provincias.
Los gobernadores se comprometieron a trabajar con los intendentes para aplicar una Ley de Responsabilidad Fiscal en los municipios.
Sobre el impuesto inmobiliario, Cornejo y sus pares acordaron que las valuaciones fiscales de los inmuebles irán a una convergencia con los precios de mercado en los próximos años, lo que aumentará fuertemente la presión impositiva sobre los hogares.
Puntos Principales
1 - Provincias bajarán Ingresos Brutos y Sellos.
2 - Gobernadores ajustarán el gasto por inflación y se llevará la misma modalidad a intendentes.
3 - Nación compensará a Buenos Aires por el Fondo del Conurbano.
4 - Se coparticipará el 100% de Ganancias, del revalúo impositivo y del cheque.
5 - Las provincias bajarán todos los juicios contra la Nación, excepto San Luis.
6 - Habrá cambios en el Régimen Previsional.
7 - Nación financiará el déficit de las cajas previsionales no transferidas.
8 - Las provincias subirán las valuaciones fiscales de los inmuebles a los precios de mercado.