El MendoTran sigue en boca de todos, y con un protagonismo fundamental en el día a día de miles de mendocinos. Luego de un debut no muy tranquilo el miércoles, el flamante sistema de transporte de pasajeros mendocino tuvo ayer su segunda jornada de vigencia plena.
Y las quejas del día uno se reiteraron y se propagaron; siempre apuntando a lo mismo: la falta de información y lo absurdo de no haber instalado la cartelería con los grupos y recorridos nuevos antes de que la nueva red saliera a la calle.
Una vez más los choferes hicieron las veces de informantes y guías para los pasajeros, lo mismo que los jóvenes apostados en los centros de atención al usuario (el de Peatonal y San Martín y el de la Plaza Independencia estuvieron repletos de gente durante todo el día).
Entre tanto malestar generalizado, las experiencias de quienes viven en los departamentos y barrios más alejados del centro son dispares. Por ejemplo, la mayoría de los vecinos de Luján consultados por Los Andes resaltaron de forma positiva los nuevos recorridos del 700 y 710 (ex grupo 1); aunque con sus detalles y excepciones.
"El 710 hace casi el mismo recorrido que hacía el 1, pero aprovecha más el Acceso Sur y lo toma hasta llegar a Aráoz. Y me deja en el centro de Luján. Me demoro casi la mitad de lo que demoraba antes, poco más de 30 minutos", indicó Juan, vecino del centro lujanino que viajó desde la Ciudad hasta su casa durante la mañana de ayer.
El 700, en tanto, también hace un recorrido más directo entre los dos puntos, aunque con una demora un poco mayor ya que en lugar de cortar camino por el Acceso; circula por la zona del Puente Olive y Carril Cervantes (Godoy Cruz y Carrodilla).
"Es todo un gran lío. Por ejemplo, acá para ahora el 710 y no hay ni un solo cartel que lo indique. De hecho, toda la gente piensa que es una parada de taxis nomás", acotó Martín, un comerciante de calle R. Sáenz Peña de Luján.
Pero no todos los pasajeros encontraron bueno este cambio . Es que muchos de los usuarios del antiguo 19 detuvieron a estas unidades durante el trayecto con la intención de llegar hasta la Plaza Godoy Cruz (punto que antes incluía el recorrido y ahora no). Y se quedaban atónitos al enterarse de que el espacio verde ya no estaba dentro del trayecto.
"¿Vos vas para Godoy Cruz?" preguntó el chofer de un 710 a su colega del 950 (que va a Maipú) durante la mañana de ayer, aprovechando el rojo de un semáforo en calle Rioja. "Es para avisarle a la gente que me va preguntando en las paradas", agregó el conductor cuando desde el 950 su par le confirmó que incluía ese departamento en su circuito.
Entre algunos vecinos de Maipú, los cambios no fueron muy bien recibidos.
"Vivo en el barrio Brisas del Parque, al lado del Canciller. El miércoles me fue bien, porque tomé el Diferencial apenas pasó y llegué rápido al trabajo. Pero hoy (por ayer) quería llegar más temprano al trabajo y llegué a la parada 10 minutos antes del horario que figuraba en Google Maps. Estuve más de una hora dando vueltas en el barrio. El primer Diferencial que pasó no paró. Tenía la opción de tomarme el normal, pero como iba jugada de tiempo decidí esperar al otro Diferencial, unas cuadras más atrás para evitar que fuera lleno. ¡Y tampoco paró!. Recién me pude tomar el tercero. No tiene mucho sentido que pongan el Diferencial si no va a a parar por no tener lugar", dijo angustiada Antonia.
Sandra Domínguez vive en Rodeo de la Cruz y ayer se acercó al centro de atención de la Plaza Independencia. "Sacaron micros que entraban a Corralitos y a Colonia Segovia. ¡Tengo familia que vive en esos puntos y ahora tienen que tomarse 3 micros para venir al Centro!.
No hay que pagar pasaje hasta el miércoles
Desde la Secretaría de Servicios Públicos insistieron en que los pasajeros no tienen que pasar la tarjeta Red Bus al momento de subir a las unidades, situación que se extenderá hasta el próximo miércoles.
Esta medida fue anunciada por el Gobierno el miércoles por la tarde, luego del complicado debut del MendoTran y con la idea de que la gente pueda familiarizarse con el sistema viajando y que los errores no deban ser costeados por sus bolsillos.
Más allá de la buena voluntad de la mayoría de los choferes para explicar e informar sobre los nuevos recorridos, varios usuarios denunciaron ayer que algunos conductores exigieron el pago del boleto.
La odisea de Francesca y Eugenia
Francesca y Eugenia son amigas, ambas tienen 43 años y comparten además otra característica: ambas son ciegas. Esta discapacidad les complica aún más el panorama -ya de por sí confuso- al momento de entender y adaptarse al MendoTran. "La comunicación de todo el cambio no ha sido pensada para personas con discapacidad.
En nuestro caso, de nada sirven los mapas interactivos y gráficos; ya que no podemos consultarlos. Si fuese texto, sería distinto porque hay un software que convierte el texto escrito en audio. Pero no hemos sido tenidos en cuenta para la información", destacaron las mujeres, que viven en el Centro y en Guaymallén, respectivamente.
Ellas esperaban durante la mañana de ayer en la Plaza Independencia el 400 o 401 que las llevara a la Plaza Godoy Cruz.
Entre tanta desinformación -o mala información- popular; casi recorrieron dos veces las 3 paradas ubicadas sobre la plaza entre la desembocadura de Sarmiento y Rivadavia.
Entre los celulares y preguntas
En las paradas de siempre (la mayoría se mantienen, más allá de que hayan cambiado los trayectos) quienes están más familiarizados con la tecnología móvil no dejan de revisar los nuevos recorridos en Google Maps. Incluso, los pasajeros completan virtualmente el viaje en el mapa antes de subirse a las unidades.
Quienes no se llevan muy bien con la tecnología, recurren a la buena predisposición de aquellos a quienes observan concentrados en sus pantallas para que busque tal o cual recorrido. Y prácticamente todos, sin excepción, recurren a cualquier chofer que se detenga para confirmarlos.
"Está mal planteado desde el comienzo el MendoTran. Lo primero que deberían haber hecho es cambiar la cartelería, poner la nueva e informar a la gente. Dar una semana para viajar sin pagar el boleto no soluciona nada, más si se tiene en cuenta que no va a ser suficiente para que la gente mayor termine de aprender las trayectorias. Y tampoco es gratis, porque a la Provincia le cuesta 30 millones de pesos que pagamos todos", destacó enojado Oscar Gómez.