En el marco del programa de mejoramiento de las calzadas, en la ciudad de San Rafael se inició la reforma de la rotonda de Granaderos y Moreno, un nudo vial que sirve de acceso y egreso de la terminal de ómnibus.
Sin embargo para que estas arterias adquieran toda su dimensión en la agilización del tránsito, debe abrirse el tramo de Granaderos desde Iselín hasta Rawson.
Según el intendente Emir Félix, el mejoramiento de esta traza como la rotonda están previstos y se dará "agilidad especialmente al tránsito de ómnibus".
Esta rotonda fue construida junto con otras que hay en avenida Moreno y que han sido objeto de críticas por parte de las empresas de transporte público porque su gran dimensión no permitía el giro provocando en muchos casos que las grandes unidades de transporte debieran efectuar maniobras de retroceso para poder retomar la marcha por Iselín u otras arterias.
En realidad el proyecto original de la terminal de ómnibus preveía que todas las unidades de transporte debían ingresar y egresar de San Rafael, por la rotonda del Mapa (César Robles) hacia el norte por Rawson hasta Granaderos y desde ahí hacia el Este por ésta hasta la terminal. Sin embargo nunca se realizaron las obras sobre esta última para dejar expedito ese camino.
La arteria que generalmente evacua el tránsito es hasta ahora la avenida Rivadavia que en horas pico colapsa totalmente. Esta apertura, según se señaló desde Obras Públicas de la comuna, momentáneamente no podrá ser posible dado que los terrenos que separan la intersección de dichas avenidas pertenecen a dos propietarios privados.
Ambos cederían los terrenos sin mayores problemas pero, precisamente, uno de ellos exige que se urbanice la zona, inversión que el Municipio "no está en condiciones de afrontar", según los dichos a periodistas, del arquitecto Enrique Ferraro, subdirector de ese organismo municipal.
