Utilizando parámetros de cantidad y tipos de textos adecuados para cada edad, la Dirección General de Escuelas (DGE) implementará durante este año un sistema para tener un registro de cuántas palabras lee cada alumno.
Se trata de un programa de fluidez lectora que tienen planeado aplicar desde primer grado a quinto año y que apunta a mejorar la comprensión.
Este anuncio se dio a conocer en el acto de inicio del ciclo lectivo 2020, que convocó a los supervisores de las escuelas de la provincia que se realizó ayer en el Auditorio Alameda.
Allí se difundieron los seis lineamientos principales en los que trabajará el gobierno educativo durante este año, entre los que figura mejorar las trayectorias de alfabetización enfocado en la fluidez lectora.
El titular de la DGE, José Thomas, explicó que la idea es contar las palabras que lee cada chico de forma sistemática, para luego cargar los resultados en el GEM (sistema de Gestión Educativa Mendoza) y que esto sirva como una herramienta para la comunidad educativa. "El mismo sistema le va a dar una retroalimentación a cada director para saber con qué chicos tienen que trabajar más", expuso.
El director de escuelas detalló que la medición concreta se hará tres veces al año y estará a cargo de un equipo de tutores externos que recorrerán las escuelas. "Esta persona le dará al chico un texto que no conoce, le pedirá leerlo y anotará hasta dónde llegó. Todo, de forma manual, para luego cargarlo al sistema", precisó.
En tanto subrayó que esto permitirá obtener un dato fidedigno para tener un diagnóstico de la situación a nivel provincial. "Primero, el dato va a ser cuantitativo, pero después se va a ver cómo los chicos van mejorando y quiénes no lo hacen. En definitiva, permite saber cómo funcionan las políticas educativas en cada escuela", señaló.
Por su parte, Silvina Del Pópolo, directora de Planificación de la Calidad Educativa, indicó que el programa busca visibilizar un componente de la comprensión lectora que es la fluidez. "Y lo hacemos a través de algo muy sencillo de relevar, que es la cantidad de palabras que el ojo reconoce a la hora de leer. Pero también se tiene en cuenta la prosodia (acentuación y pronunciación) y la figura expresiva que permite construir sentido", comentó. Tal como adelantó, apuntan a entender qué pasa en los procesos de comprensión. "Nos paramos en el primer escalón de la comprensión lectora para llevar a los proceso más profundos", subrayó.
Antecedente
Del Pópolo recordó que la provincia empezó a trabajar de forma similar con fluidez lectora en 2019. "En ese momento trabajamos con 220 escuelas, un total de 7.000 chicos a los que seguimos y acompañamos", contó. A su vez relató que ese relevamiento permitió concluir que había una gran cantidad de chicos por debajo de lo esperado con respecto a su edad.
"A partir de esa medición inicial les propusimos un trabajo sistemático para el aula y notamos una mejora significativa de hasta un 20% en reconocimiento de palabras y prosodia", aseguró.
La funcionaria adelantó que la idea de este año es extender el programa a toda la primaria y la secundaria. "De hecho los docentes de todos los niveles van a trabajar en una jornada de fluidez para la comprensión en la cual les vamos a dar algunos parámetros para medir la fluidez de acuerdo a cada edad", adelantó a la vez que aclaró que son simples indicadores ya que si se complejiza el texto es de esperar que se baje la velocidad de reconocimiento. Asimismo anticipó que el programa va a estar acompañado de textos apropiados para cada edad y que la idea es hacer tres mediciones de cantidad de palabras a lo largo del año.
Para Del Pópolo el programa también permitirá poner en agenda de los docentes la fluidez lectora. "Se va a trabajar dentro de la hora de lengua y si bien el docente puede elegir el momento para hacerlo la idea es que sea un trabajo diario", expuso. Además remarcó que se busca que los chicos hagan una reflexión sobre lo que les pasa con la lectura. "Las actividades que se proponen en fluidez siempre tienen que ver con el desarrollo de vocabulario, identificar las palabras que más les cuesta leer y porqué, entre otras", enumeró.
No posponen el inicio de las clases
Durante el acto de ayer, el titular de la DGE, José Thomas, ratificó que el próximo 26 de febrero se dará inicio al ciclo lectivo. Esta confirmación fue necesaria luego de que se especulara desde el Ejecutivo con modificar el comienzo de las clases por las altas temperaturas que azotan la provincia.
"El calendario está confirmado y no se toca por una cuestión principal, que es que cumple la ley. Sería muy curioso que alguien pida no cumplir una ley nacional", manifestó el titular de la DGE. Asimismo reconoció que puede haber algún tipo de contingencia, como por ejemplo un viento zonda que obligue a posponer el inicio, pero aclaró que esta situación hipotética no tiene nada que ver con una modificación en el calendario estipulado.
Las clases empezarán el 26 de febrero y terminarán el 11 de diciembre, por lo que se cumplirán 183 días de clases.
Qué opinan sobre esta medida dos especialistas
Especialistas en educación consultados por este diario dieron su opinión sobre la medida que acaba de anunciar la DGE.
Isabel López, magister especialista en Didáctica de la Lengua, dijo que entiende que la fluidez en la lectura puede contribuir a la comprensión. Pero aclaró que lo importante es saber cuál es la finalidad de medir este aspecto y qué se va a hacer con ello. "Si la investigación se realizará en escuelas en donde se ha venido trabajando al respecto, permitirá descubrir las fortalezas y debilidades del programa. Si se hace con una muestra diferente no le encuentro sentido. Si recuerdo bien, en 2007 un estudio realizado en la provincia puso en evidencia que el 70% de los niños de tercer grado no leía con fluidez". En tanto, el psicopedagogo y licenciado en Gestión Educativa Alejandro Castro Santander consideró esta propuesta como una medida aislada. "Podría ser bueno para empezar, pero espero que tengan una mirada más general sobre la lectura", expuso.
