En el Juzgado Federal de Mendoza 2, Secretaría Civil 3, la empresa EOS S.A. presentó, durante la primera semana de marzo, un amparo con una medida precautoria de no innovar respecto de la paralización como sanción a su establecimiento vitivinícola por la falta de pago de las contribuciones obligatorias impuestas por la Corporación Vitivinícola Argentina.
“Hemos presentado amparo con una medida precautoria, respecto de la paralización que realiza la Coviar, a través del INV, frente a la falta de pago de la contribución obligatoria. Esta paralización que realizan, hace que el establecimiento no pueda pedir permisos de traslado”, indicó Natalia Maturano, patrocinante de EOS S.A.
Agregó: “Es conocida la modalidad de compra-venta de vino que incluye toma de muestras de vino, aceptación de la misma, traslado del vino y posterior facturación y cobro. Si la persona quisiera realizar una compra-venta de vino los compradores siempre solicitan el traslado a la bodega compradora. Sin ello no se concreta la operación. Así están coartando la libertad de mi cliente de comercio, de industria, derecho de propiedad, entre otros”.
Según estiman, la medida precautoria debería quedar resuelta entre la semana que viene y la próxima, mientras que la cuestión de fondo tendrá otros plazos judiciales.
Coviar administra los recursos que, mediante la contribución establecida en la Ley 25.849, financian las acciones necesarias para concretar los objetivos fijados en el Plan Estratégico Argentina Vitivinícola 2020.
El incumplimiento del pago de la contribución obligatoria implica la paralización de la bodega.
“No tenemos ninguna comunicación formal al respecto”, indicó a Los Andes, la gerente general de Coviar, Cristina Brachetta.
De efectivizarse el amparo y la medida precautoria, ésta sería la primera vez que Coviar enfrenta problemas judiciales por el cobro de la contribución avalada por Ley.
Datos provistos por la Corporación indican que a diciembre de 2014, de las 1.518 cuentas que aportan a la Coviar, sólo 90 empresas pagan más de $ 100 mil anuales, mientras que 407 pagan una contribución anual menor a $ 500.
“En este momento tenemos 140 bodega paralizadas. Ese número es menos de la mitad del promedio histórico. Esto es así, porque hemos subido el piso del monto de la deuda para paralizar. Mientras que en años anteriores correspondía a $ 2.000, este año corresponde a $ 5.000”, estimó Brachetta.
La gerente de la Corporación sostuvo que “tenemos un buen nivel de cobro” y destacó que “hemos notado un aumento en la cantidad de cuentas que piden planes de pago”.
Las repercusiones
En tanto se dirime el tema judicial, las entidades que forman parte de Coviar van tomando su posición sobre el tema.
Juan Carlos Pina, gerente de Bodegas de Argentina y miembro del directorio de Coviar, aseguró que “desde el directorio de Coviar, se han tomado medidas para flexibilizar el pago de la contribución que es por Ley. En tanto, también es cierto que la vitivinicultura está en crisis, pero hay que tener un equilibrio”.
Por su parte, Carlos Iannizzoto, gerente de Acovi, afirmó que “no me extraña que surjan este tipo de presentaciones debido a la situación crítica, por todos conocida, que atraviesa la vitivinicultura. Los productores y las pequeñas bodegas están atravesando una situación de quebranto y van a dejar de cumplir con sus compromisos y obligaciones. No obstante, las contribuciones de Coviar están determinadas por Ley”.
Durante la vendimia, tanto desde Aproem como desde el Centro de Bodegueros y Viñateros del Este, se pidió la “suspensión de la contribución obligatoria a la Coviar”.
