La vida del alemán alemán
Michael Schumacher
, siete veces campeón mundial de Fórmula Uno, no está en peligro aunque se teme que le queden secuelas por el accidente, según informó uno de los médicos a un amigo personal del ex piloto, el francés Philippe Striff.
Streiff, ex piloto de Formula Uno, conversó con el doctor Gerard Saillant, uno de los cirujanos que atienden a Schumacher y dijo: "No soy médico, estoy apenas repitiendo lo que me dijo Saillant y me comentó que la situación es seria pero que la vida de Michael no está más en riesgo aunque temen por las secuelas".
El hospital no confirmó oficialmente la información de Streiff, pero la asesora de prensa de Schumacher dejó el centro de internación con un rostro más tranquilo.
Streiff teme por esas secuelas e incluso cree que el alemán quede con alguna parte del cuerpo paralizada o pueda perder el habla.
"Están haciéndole tomografías todos los días para ver cómo los coágulos son absorbidos, cuanto más rápido lo sean menos secuelas tendrá. Pero si la hemorragia continua, corre riesgo de tener una hemiplejia o la pérdida del habla", dijo Streiff según Globo Esporte.
El francés amigo de Schumacher corrió en Fórmula 1 entre 1984 y 1989 en los equipos Renault, Ligier, Tyrrell y AGS, y quedó parapléjico cuando se accidentó en Río de Janeiro en unas pruebas privadas en Jacarepaguá. Corrió 58 carreras y sumó 11 puntos.
Schumacher continúa internado en estado de coma en Grenoble, tras el grave accidente ocurrido el 29 de diciembre cuando practicaba esquí, se cayó y golpeó violentamente su cabeza contra una roca en las pistas nevadas de Meribel.
Su padre Rolf, su esposa Corinna, sus hijos Ginamaría y Mick, y su hermano Ralf, también ex-corredor de Fórmula 1, se encuentran instalados en el Hospital, rezando y esperanzados en su recuperación.