Este viernes la Justicia Federal resolverá un pedido de probation (suspensión del juicio) solicitado por la defensa del
médico pediatra Leandro Di Yacobo, sobre quien pesa una imputación de homicidio culposo
, en concurso real con adulteración de documento público que hace más de 6 años firmó el juez Walter Bento y que después de ser apelado terminó siendo confirmado por la Cámara Federal de Apelaciones
El hecho investigado está referido al fallecimiento de la niña María José Bauzá (8) que padecía el síndrome de Down y que fue atendida en el Centro Integral de la Madre y el Niño, propiedad de Di Yacobo y que funcionaba en el hospital Militar.
El hecho ocurrió el 14 de agosto de 2006, cuando la niña murió como consecuencia de un edema pulmonar, mientras era trasladada en una ambulancia, después de ser asistida en el centro de medicina pediátrica.
Desde ese tiempo la causa pasó por varias etapas, hasta que en mayo de 2009, el expediente fue remitido al Tribunal Oral N° 2 para que se lleve a cabo el juicio oral y público.
Sin embargo ahora un pedido de probation, a lo que la familia se opone, promete extender la demora en llegar a debate.
Los padres
Los padres de la niña en diálogo con Los Andes rechazaron este planteamiento al asegurar que la medida (probation) "es una nueva piedra puesta en el camino de la Justicia". Oportunidad en que explicaron -con el patrocinio de los abogados Emilio Vázquez Viera (padre e hijo), junto a Ariel Civit- que esta medida "sirve para hechos leves, por lo que no se puede aplicar en una muerte, como es este caso".
Durante la charla Cecilia, madre de la niña, confió que "si el médico durante todo este tiempo dijo que era inocente, que lo demuestre en un un juicio oral y público.
La niña murió el 14 de agosto y cuatro días después los padre de María José denunciaron el hecho a la Justicia Federal (con competencia sobre el predio militar).
En ese momento se conoció que la niña fue llevada en ambulancia hasta el Centro Integral de la Madre y el Niño propiedad del médico denunciado al presentar una "crisis de bronco espasmo", según los paramédicos que la asistieron en el traslado.
En el centro, Leandro Di Yacobo (pariente de la familia Bauzá) le dijo a los padres que la nena presentaba "laringitis".
Así la niña fue devuelta a su casa, pero horas más tarde se desmayó y debió volver al centro y ahí se comprobó que era necesario ponerle oxígeno pero el equipo "no funcionaba", por lo que terminó siendo derivada al Español o el Notti, aunque a la altura de los portones del parque murió.
Denunciado el hecho, el juez federal realizó una inspección ocular en el hospital y ordenó una necropsia que estuvo controlada por personal de Gendarmería Nacional, tras lo cual en setiembre del mismo año imputó al médico.