Era un cheque por 100 millones de dólares, una cifra tan impresionante que ni siquiera Floyd Mayweather Jr se resistió a mostrarlo a algunos reporteros después de la pelea en la que venció a Manny Pacquiao.
``Pero no tomen fotos'', pidió Pacquiao a la prensa mientras sacaba el cheque del sobre. ``No quiero una sola foto de esto''.
El cheque será pronto cobrado, con lo que ese pago se sumará a los millones de dólares que Mayweather tiene ya en sus cuentas bancarias. En realidad, fue sólo una parte del dinero que devengará el campeón por esta pelea.
El total podría rebasar los 200 millones de dólares una vez que se determine su tajada por las ventas de la transmisión televisiva en la modalidad de ``pago por ver''.
La pelea que más dinero ha repartido en la historia no fue la mejor, pero nadie puede culpar a Mayweather. Hizo lo que hace siempre para derrotar el sábado a Manny Pacquiao.
Y el triunfo consolidó el legado del estadounidense como el mejor púgil de su generación, aunque no le haya ganado muchos admiradores.
Será difícil que alguien emule este combate, aunque sea sólo por el monto estratosférico de dinero que generó. Es difícil imaginar que Mayweather pueda pelear por 30 o 40 millones, una cifra que parece ahora desdeñable en comparación con la que obtuvo el sábado.
Se trata de la ganancia más jugosa que un atleta de cualquier deporte se haya embolsado en una sola jornada.