Siete personas murieron en un tiroteo en un edificio residencial en Hialeah, la zona más latina de Miami, donde un hombre tomó como rehenes a los vecinos desde el viernes en la tarde hasta que murió a manos de la policía ayer por la madrugada.
Las víctimas del tiroteo fueron tres hombres y tres mujeres, entre ellos una pareja de la tercera edad de Colombia, que administraba el edificio, y un vecino que no tenía relación con ellos, de origen ecuatoriano, reveló la policía de Hialeah.
“Seis personas inocentes murieron y también el sospechoso que inició esta situación”, dijo el sargento Eddie Rodríguez, portavoz del Departamento de Policía de Hialeah, noroeste de Miami. Rodríguez explicó que aún se desconocen los motivos del crimen. Según El Nuevo Herald, el supuesto asesino era un hombre cubano de unos 50 años.