Fue por la heroica y casi lo logra. Debía juntar muchos puntos en su canasta para ingresar al Play Off, no sin antes depender del resultado de sus rivales directos. De las 47 unidades en juego se llevó 42 y por apenas 1 no logró su cometido.
Dejó todo en el circuito de Rafaela, a tal punto que comandó la carrera decisiva (antes había vencido en su serie) y finalmente fue escolta de Omar Martínez, quien se aseguró la fase regular. Luego de su sexto podio en Turismo Carretera, Matías Jalaf dialogó con Más Deportes sobre la espectacular tarea en el óvalo con chicanas.
-¿Cómo viviste el día después?
-Demasiado tranquilo. Cuando venía en viaje hacia Mendoza me llamaron para que fuera a algunos programas de automovilismo en Buenos Aires, pero ya era tarde. Quería festejar mi cumpleaños, aparte de celebrar el podio en casa.
-Si bien celebraste la segunda posición con todos los integrantes del Catalán Magni Motorsport, a Rafaela fuiste solo.
-Así es. Salí el jueves para allá y sinceramente no me molesta ir solo. Se trabaja mucho más tranquilo con el equipo porque estás 100% pensando en los trabajos para el auto, los tiempos, la puesta a punto. Es mejor para todo el grupo.
-Debías sumar muchos puntos para tener chances de clasificación al Play Off. Por apenas una unidad no lo lograste y encima casi ganás la carrera ¿Te esperabas que saliera así?
-No me servía otra cosa que no fuera la victoria. Cuando me metí tercero en clasificación y gané mi serie, era lógico que quería ganar la final porque el auto andaba bárbaro. Di todo para entrar a la Copa de Oro y lamentablemente no se dio.
-Si te daban a elegir, ¿optabas más por ingresar al Play Off que por la victoria?
-Sinceramente, el podio no lo disfruté tanto porque sé que tenía auto para ganar. Estaba contento pero lo ideal hubiese sido entrar a la definición por el título; si era ganando mejor. Si se daba así, tirábamos la casa por la ventana. Pero pusimos todo y por poco no se dio.
-Cuando seguiste de largo en la segunda chicana, ¿pensaste que se terminaba todo?
-Se quedó acelerado y no pude hacerla, por eso pasé derecho. Entonces, cuando salí de la vía de escape, tuve que meterme detrás de (Guillermo) Ortelli y (Norberto) Fontana empezó a atacar. Salí muy lento. Ahí hacía punta y taco, pero tuve que recurrir a los rebajes en las vueltas siguientes para que no me pasara lo mismo. Fue raro y a la vez difícil.
-Lo bueno es que, con el 14º lugar en el torneo, quedaste a la expectativa pensando en los "tres de último minuto" que ingresan para la última carrera.
-Cuando vi el diario del lunes y observé que no estaba en la foto de los 12 de la Copa, no me gustó para nada. Estuve a sólo un punto. Es cierto que tengo otra chance, pero no es lo mismo porque no voy a estar en esa foto con los que definen el título en La Plata. Aparte, el Gurí (Martínez) arrancará el Play Off con 31 puntos y (Matías) Rossi con 16 por las dos victorias; es imposible alcanzarlos a ambos.
-Pero contás con un vehículo como para repetir lo de Rafaela.
-Seguro. Eso pasa porque estoy en un equipo de primer nivel que trabaja día y noche para estar adelante. Pero siempre digo que en el TC es muy difícil mantenerse; es como una lotería. El domingo salí segundo en Rafaela y en San Luis puedo estar 23º. Es así, aunque estoy muy tranquilo porque tengo un auto que funciona como quiero.
-Mientras vos manejabas el Falcon y peleabas por la victoria, en los boxes sacaban cuentas. ¿Cómo fue esa definición?
-Supuestamente me dijeron por radio que entraba, después me comentaron que no. Fue así en cada vuelta, hasta que en la última se fue (Norberto) Fontana en una chicana y (Christian) Ledesma avanzó un puesto, por lo que entró por un punto además de la exclusión a (Nicolás) Bonelli. Fue muy intenso, lástima que no pude entrar.
-El Gurí Martínez dijo que, en condiciones normales, no te hubiera vencido porque vos hacías el curvón más rápido que él. ¿Lo podrías haber vencido?
-Estaba difícil porque su Ford funcionaba muy bien con el deflector, algo que yo no llevaba en el Falcon. En lo recto se me escapaba muchísimo. Pienso que tiene un auto que está por encima de todos; por algo ganó la fase regular.
-¿Qué falta para poder ganar?
-Se tienen que alinear los planetas, que salga todo perfecto desde la clasificación. Estamos cerca, pero vuelvo a decirte que el TC es muy parejo y puede pasar de todo.
-San Luis será la próxima. Es una buena chance para lucirte.
-Así es. Estaré cerca de casa, por eso sería lindo dar pelea. Estoy en un equipo que me deja tranquilo y Rody Agut se pasa con los motores.
Lo esperaban con una torta
Matías se regaló el podio un día antes de festejar sus 31 años de edad. Ayer, su cuenta de Twitter y de Facebook estuvo lleno de saludos y su mujer, Natalia Romboli, se despachó con una torta para recibirlo luego del viaje.
“Me hizo una chocotorta que estuvo increíble. La verdad, se pasó”, lanzó Matías.
A su vez, dijo: “Es increíble que ya pasé los 30 y en TC llevo 11 temporadas”, recordando que debutó en 2005 en el circuito de Mar de Ajó.