El hallazgo del cuerpo de una mujer dentro del baúl de un auto sirvió para determinar que la joven, de 23 años, madre de 3 hijos, había sido asesinada a golpes con un hierro. La continuidad estuvo en la detención de su pareja para encuadrar el hecho en un caso de violencia de género.
La víctima se llamaba Débora Gómez, madre de dos niños de 5 y 3 años, y de una bebé de cinco meses, fue hallada muerta en el interior de un Renault 12 blanco y manchado con sangre, en la prolongación de la ruta 144, sobre calle Cubillos, cerca de los puentes de hierro del Río Diamante, del sureño departamento de San Rafael.
El juez que entiende en la causa, Pablo Peñasco, confirmó el homicidio (al que se llegó por una denuncia al 911), aunque prefirió esperar la investigación del hecho para calificarlo.
También hizo referencia a que el cuerpo estaba dentro del vehículo, “aunque -estimó- que el crimen había sido cometido en otro lugar”.
Finalmente el magistrado confirmó la detención de una persona que “sería el concubino o marido", oportunidad en que trascendió que se trataría de Jesús Ayala, de 28 años, que sería el progenitor de la beba.
Con un hierro
Del procedimiento también participaron los comisarios Hugo Lucero y Eduardo Algaba, jefes de la Departamental y de la Policía de Investigaciones de San Rafael, quienes fueron coincidentes en asegurar que “la muerte de la joven fue provocada con un elemento contundente”, oportunidad en que señalaron que había sido con un hierro.
El Renault 12 (UAC 112) fue encontrado dentro del predio que ocupa la vivienda, por los efectivos que acudieron al llamado, habría abortado la idea original de trasladar el cuerpo hacia otro lugar más alejado.
Tras el procedimiento el cadáver de la mujer fue derivado al Cuerpo Médico Forense a los efectos legales, mientras que el detenido quedó alojado en la Comisaría 38 que tiene a su cargo la instrucción del hecho.