Se jugó como si fuese una final (anticipada). Es que tanto Andes Talleres como Fadep, buscan adueñarse del segundo boleto que está en juego y que te deposita en la próxima fase. El primero, es de uso exclusivo de Gutiérrez, único líder, invicto y con puntaje ideal del grupo 5. Por esta razón, Matadores y el equipo de Amigos por el Deporte, brindaron un lindo espectáculo. Atractivo y con acciones en ambas áreas.
El triunfo fue para el Azulgrana por 2-0, con dos golazos de Paul "Cuete" Martín, quien colgó el balón en un ángulo tras un hermoso tiro libre; y en el segundo tiempo, recibió un pase exquisito de Horacio Malinar (su mejor partido en Talleres) y definió con categoría por abajo del cuerpo de Diego Narváez, que nada pudo hacer.
El equipo de Fiti Estrada ganó porque golpeó en los momentos justos. Fue efectivo. Fadep, fue quien propuso más intensidad defensiva y con su juego característico por las bandas y los pelotazos cruzados, complicó al Matador en los primeros minutos. Es más, Acordino (una de las figuras) se revolcó tres veces en los primeros minutos del partido. Talleres aguantó estas embestidas y en la primera situación que tuvo, no falló. Golazo de Martín y arrancó otro partido. Porque Fadep, más allá de su dominio de balón y su adelantamiento territorial, perdió el volumen de juego y aparecieron las individualidades de Talleres. Para destacar, el sacrificio de Acuña, Malinar y Moreno. Sin dudas, el mejor partido en defensa de Talleres, la línea de tres fue una apuesta arriesgada pero satisfactoria. La gran diferencia, la marcó el "Cuete" Martín.
Paul Martín, un gaucho azulgrana
Llegó al club hace un año y en el primer partido convirtió cuatro goles y justo contra Fadep. De Inmediato, se ganó el cariño de compañeros e hincha. Hoy, es un hijo más del club y el “cuete está feliz: “Tengo una felicidad enorme. Un desahogo infernal. Yo sabía que este equipo iba a demostrar que estaba entero”.
