Los ex marinos Luis Sosa, Carlos Marandino y Emilio Del Real fueron condenados ayer a cadena perpetua, al concluir el juicio por la denominada "Masacre de Trelew", ocurrida el 22 de agosto de 1972 en la Base Almirante Zar, de Chubut. El Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia resolvió además absolver a Rubén Paccagnini del delito de coautor y a Horacio Bautista, quien había sido acusado de encubrimiento.
El histórico fallo se conoció pasado el mediodía, a 40 años de los hechos. Fue leído por Enrique Guanziroli, presidente del tribunal que también integraron Nora Cabrera de Monela y Juan Velázquez.
Los camaristas dispusieron también que el juzgado federal de Rawson insista con el pedido de extradición del ex teniente Roberto Bravo, quien se encuentra prófugo en Estados Unidos. Y seguirá con atención la evolución de Horacio Mayorga, procesado por la masacre pero que no fue juzgado en esta etapa por razones de salud.
El juicio se inició a principios de mayo pasado en el Centro Cultural José Hernández de Rawson, que ayer estuvo colmado por dirigentes de Derechos Humanos, los que despidieron a los condenados al grito de "asesinos". También estuvieron familiares de las víctimas y funcionarios provinciales encabezados por el gobernador Martín Buzzi.
La masacre de Trelew ocurrió en la madrugada del 22 de agosto de 1972. En la Base Almirante Zar fueron fusilados 19 militantes de las organizaciones armadas FAR, ERP y Montoneros. Sólo 3 sobrevivieron. Una semana antes habían intentado fugarse de la cárcel de máxima seguridad de Rawson, pero no alcanzaron el avión previsto para el escape.
La versión del gobierno de facto de Agustín Lanusse aseguró que los militantes habían intentado fugarse nuevamente. Y que por eso debieron dispararles. Pero los sobrevivientes y otros testigos confirmaron el fusilamiento.
Las víctimas fueron Carlos Alberto Astudillo, Alfredo Elías Kohon, María Angélica Sabelli, Rubén Pedro Bonet, Eduardo Adolfo Capello, Mario Emilio Delfino, Alberto Carlos del Rey, Clarisa Rosa Lea Place, José Ricardo Mena, Miguel Ángel Polti, Ana María Villareal de Santucho, Humberto Segundo Suárez, Humberto Adrián Toschi, Jorge Alejandro Ulla, Mariano Pujadas y Susana Graciela Lesgart. Los sobrevivientes, María Antonia Berger, Alberto Miguel Camps y Ricardo René Haidar, fueron desaparecidos luego durante la última dictadura, aunque antes lograron relatar los hechos.
La dictadura de Lanusse archivó la causa tras un breve sumario. Pero la investigación se reabrió en 2006, a cargo del juez federal de Rawson Hugo Sastre, quien declaró a la masacre como un crimen de lesa humanidad. De otra manera hubiera prescripto.
Tras conocerse el fallo, la querella anunció que apelará las absoluciones de Bautista y Paccagnini. El primero fue quien hizo los sumarios tras la masacre y Paccagnini era el jefe de la Base cuando ocurrieron los hechos. También que insistirán con la extradición de Bravo: "Si hubiese estado acá, le hubieran dado perpetua", dijo Eduardo Hualpa uno de los abogados de los familiares. El tribunal resolvió que los condenados continuarán libres hasta que la condena sea firme. Luego irán a una cárcel común.