Suele decirse que para disputar un clásico los futbolistas tienen que ofrecer un plus, ese algo más que por lo general suele inclinar la balanza a favor. Teniendo en cuenta la visión de ambos entrenadores, su forma de ver el fútbol y de realizar los planteos tácticos, todo aquello se potencia aún más porque Guillermo Barros Schelotto y Marcelo Gallardo saben que se trata de un encuentro distinto al que jugaron en el Monumental o al que los supo tener como protagonistas dentro del campo de juego.
Para el Mellizo y el Muñeco, la elección de los titulares no solamente tiene que ver con las cualidades técnicas y físicas de sus dirigidos, sino también la mentalidad que demuestran a la hora de ponerse las camisetas de Boca y River, respectivamente. No es lo mismo para Gallardo si puede contar con Leonardo Ponzio (figura en los duelos coperos del año pasado), que si ahora debe buscar un remplazante porque está suspendido. No es lo mismo para Guillermo no contar con la experiencia del Cata Díaz, por más que Fernando Tobio rindió bien cuando fue titular.
Dentro de ese contexto, cabe decir que en la previa y con los respectivos partidos coperos en el medio, a sendos técnicos les faltan referentes. Pero en ello no se piensa en estos momentos. Eso de “partido a partido” se toma más a rajatabla que nunca en esta semana. Ninguno quiere privarse de nada. Buscan terminar primeros en sus grupos de la Libertadores para tener mejores cruces en octavos. Entonces pensar en el más allá se hace complicado, sobre todo, por tratarse del partido que nadie quiere perder.
En Boca, además de Díaz (y la eterna baja de Daniel Osvaldo), está en duda Agustín Orión, con molestias musculares. Tampoco Carlos Tevez se entrenó con normalidad por sus dolores en la cintura en los últimos días, aunque hoy será de la partida por la Copa. Más allá de todo eso, el Apache estará ante el Millo. No así Federico Carrizo, quien padece un desgarro. Guillermo Sara es una seria alternativa en el arco; Marcelo Meli podría ingresar por Gago (Pablo Pérez llegaría con lo justo) y Andrés Chávez o Sebastián Palacios remplazarían al Pachi.
En River no estarán dos bastiones como el mencionado Ponzio y Vangioni, líderes en actitud y presencia en el equipo ganador de Gallardo. Otro que tampoco estaría es Emanuel Mammana. El DT debió correr a Mercado como central, aunque la buena noticia fue el rendimiento de Milton Casco en los últimos partidos. Por Ponzio debería analizar si hace un lugar a Nacho Fernández o Lucho González o si cambia el esquema. Alternativas tienen. Por lo pronto, los DT piden no tener más bajas. ¿Y Maidana?
