Con las mayores temperaturas también aumentan los casos de mordeduras de arañas, según aseguran especialistas en el tema. “Mientras más calor hace más común es que haya consultas por picaduras porque la gente sale más”, señaló el doctor Mario Vujovich, jefe de Guardia del hospital Lencinas.
En el hospital pediátrico Humberto Notti se encuentra internado un niño en estado delicado luego de haber sido picado por una loxosceles o araña domiciliaria. En un primer momento se supuso que podía ser una viuda negra o latrodectus.
Sin embargo la sintomatología que presentó con el correr de las horas permitió un diagnóstico más específico. El último parte médico indicó que se encontraba en estado grave, con respirador. Se le está realizando diálisis por la insuficiencia renal y el pronóstico es reservado.
Según explicó Horacio Falconi, veterinario de departamento de Zoonosis, en la época de calor también hay más casos de mordeduras porque los días son más largos por lo que se les activa el metabolismo a lo que se suma que en esta época hay más insectos de los cuales ellas se alimentan.
El jefe de Toxicología, Aldo Sergio Saracco, opinó en el mismo sentido: “Generalmente hay más casos desde octubre hasta marzo”.
El veterinario Falconi explicó que salvo un grupo acotado, la mayoría de las arañas no son venenosas. Estos dos tipos señalados son los más peligrosos de la provincia. De todas formas aclaró que el caso de este niño fue excepcional.
Características
El hábitat natural de la loxosceles, araña domiciliaria, marrón o de los rincones, es el interior de las viviendas. Se ubica generalmente detrás de los cuadros, debajo o detrás de los muebles o en la ropa.
Puede hospedarse en el interior de los placares, debajo de los cajones o en depósitos. Prefieren los lugares tranquilos y es lucífuga, es decir que escapa de la luz por lo que es frecuente verla de noche. Vale aclarar que no es un insecto agresivo.
Sin embargo pica cuando se siente amenazada, por ejemplo apretada con el cuerpo entre las sábanas o al ponerse la ropa.
En tanto, Saracco detalló que la latrodectus o viuda negra es una araña extra domiciliaria por lo que los accidentes suelen ocurrir en el exterior. “Está en los árboles, jardines, entre ladrillos, piedras o leña; es muy frecuentes este tipo de accidentes en la época de cosecha de ajo o de vid”.
El veneno de la viuda negra es neurotóxico, es decir que su efecto es sobre el sistema nervioso y los síntomas aparecen a los 15 ó 30 minutos. Saracco detalló que cuando pica se siente un pinchazo.
“Al rato empieza a sentirse una sensación de ardor y rigidez en la zona que se expande, además del cuerpo contracturado”. Por la generación de adrenalina produce taquicardia, hipertensión, pupilas dilatadas, nerviosismo, excitación.
En tanto, la araña domiciliaria tiene un veneno termonecrótico, produce necrosis o muerte del tejido donde aplica el veneno y en algunos casos destrucción de los glóbulos rojos.
Los síntomas aparecen después de las 24 horas. En los casos graves el paciente se pone ictérico y con insuficiencia renal y la causa de muerte puede ser por anemia.
La viuda negra suele picar en las extremidades mientras que la loxosceles suele provocar lesiones en tronco o cara interna de los miembros.
De la primera se producen unos 50 a 60 casos por año en la provincia, mientras que de la segunda la mitad, de los cuales 2% genera complicaciones a nivel de la sangre con riesgo grave para la vida.
En los últimos 15 años se han producido 5 casos de muerte por esta causa.
Mantener limpio y ordenado
Mantener la casa limpia y ordenada es la primera recomendación para evitar que se aloje la loxosceles. Es recomendable sacudir la ropa o revisar los zapatos antes de colocarlos, especialmente si hace tiempo no se usan o han estado en el piso o las prendas colgadas en la pared. Plumerear, correr los muebles y los cuadros ahuyentará a esta pequeña visita.
Dejar las camas separadas de la pared unos 20 centímetros. Si se van a ordenar los cajones, no colocarlos sobre la cama porque puede estar debajo.
Al ordenar un depósito o poner las manos debajo de los muebles para correrlos usar guantes de descarne o algún otro material grueso.