El Deportivo Maipú sumó su primer triunfo tras regresar a la categoría, Independiente Rivadavia ratificó su gran presente sumando de a tres en José Ingenieros y Gimnasia, supo reaccionar para ganarle a un Estudiantes de Buenos Aires que no le hizo las cosas fáciles en gran parte del encuentro. Sí, tres triunfos mendocinos en una misma fecha, situación que no se daba desde hacía casi 21 largos años de alegrías y tristezas para los representantes de la Liga Mendocina de Fútbol.
La histórica victoria del Cruzado frente a Quilmes (2-1) en tiempo de descuento, con un brillante testazo de Lucas López, quien segundos antes había ingresado para ser una alternativa ofensiva en las pelotas detenidas. Los tres puntos que se quedaron en el Omar Higinio Sperdutti fue “un premio al esfuerzo y a no bajar los brazos”, como el mismo entrenador Luciano Theiler lo reflejaría en su conferencia de prensa. “Me pone contento porque hay mucha gente que trabaja en el club y esto es un mimo para todos. Nos da fuerza para lo que se viene”, agregaba. Y no es para menos. En los encuentros anteriores Maipú había hechos méritos suficientes como para sumar más puntos que los dos con lo que llegó al encuentro del domingo. Sin embargo, por errores propios y también por virtudes de sus rivales, al Botellero se le seguía negando la victoria. Un éxito que fue una bocanada de aire fresco para un equipo que viene de ascender y cuya estructura futbolística, es similar con la que afrontó el Torneo Federal A pasado.
Diferente es la situación para Gimnasia y Esgrima e Independiente Rivadavia. El Lobo también mantuvo una sólida base de la campaña anterior, en la que quedó eliminado en un cruce de playoff por el segundo ascenso a Primera División, y desde ese momento, la dirigencia empezó a barajar y dar de nuevo. Ratificó a Diego Pozo en la conducción técnica y trajo lo justo y necesario en materia de refuerzos. Piezas que son claves en el funcionamiento de un equipo que luego de tropezar en su estadio contra Tigre (0-4), mejoró en todos los sentidos, se hizo sólido en el fondo y a partir de esas premisas logró dos victorias consecutivas (Alvarado y Estudiantes de Caseros) que hoy lo tienen como protagonista dentro de esa Zona 1.
La Lepra, por su parte, da que hablar. Sus hinchas están muy ilusionados con este brillante presente, pero claro está, es el principio de un camino largo por lo que hay que ser cuidadosos con tanta ansiedad e ilusionismo. Es cierto que el equipo no luce, pero Gabriel Gómez le dio una impronta de equipo protagonista y muy resultadista en estos tiempos donde al parecer lo único que sirve es ganar. En José Ingenieros, Independiente hizo pata ancha a un comienzo de encuentro donde Almagro parecía dominar. Superados esos diez minutos de la primera parte, el Azul se animó y con dos jugadas de pizarrón, abrochó una victoria fundamental para ser uno de los líderes junto a Güemes de Santiago del Estero, justamente, el próximo rival.
Tres grandes noticias para Mendoza, una provincia que siempre fue futbolera y que en la actualidad tiene cinco equipos en las tres principales categorías de la AFA. Una gran novedad y cuyo último antecedente, de tres equipos mendocinos terminando victoriosos en una misma jornada, data del año 2000. Concretamente de un 27 de junio de ese año, cuando el Atlético Club San Martín se impuso sobre Cipolletti de Río Negro por 3-0 (goles de Alejandro Batalla, Arsenio Benítez y Ortiz), en el Feliciano Gambarte, Godoy Cruz hacía lo propio frente a Juventud Antoniana de Salta, con tantos de Sebastián Brusco y Alejandro Abaurre; mientras que la Lepra visitaba el Norte argentino y conseguía ganarle a Gimnasia y Tiro, gracias a los festejos de Lucas Valdemarín y Horacio García. Después de esas victorias, en setiembre de la misma temporada, el resultado no pudo repetirse ya que por esa octava fecha, el León tuvo fecha libre, en tanto que Independiente le había ganador (2-0) a Atlético de Rafaela y el Tomba, con un solitario gol de Roberto Oste, había cantado victoria en Jujuy, frente a Gimnasia. Y más acá en el tiempo, esos tres representantes mendocino estuvieron muy cerca de repetir la hazaña. Fue el 3 de abril de 2001, para la segunda vuelta de la Zona Interior de la otrora B Nacional. Ese día, la Lepra había goleado a Racing de Córdoba (Carlos Paratore -2- y Claudio Del Bosco); el Chacarero se impuso a Rafaela 2-1 con tantos de Pablo Panella y Gustavo Raggio, mientras que al Tomba se lo empataron en los últimos minutos, de penal, en un encuentro en el que fue superior a Brown de Arrecifes y que lo ganaba con dos anotaciones de Ricardo Dillon.
Y ese lejano junio del 2000 recién pudo romperse el pasado 11 del corriente, un domingo que quedará en la historia del fútbol mendocino ya que sus tres representantes en la Primera Nacional, sumaron de a tres por segunda vez desde que AFA sacó los Nacionales y el formato de torneos es diferente al de aquellos tiempos.
