Se acabaron las especulaciones en la NBA con respecto a lo que puede suceder con el francés. Después de los flashes que dejó en la pretemporada, la vara había quedado alta para que el jugador de 2,24m, que saldría al rectángulo de juego contra un Dallas Mavericks que quiere mejorar la imagen chata que dejó en la 22/23. Victor Wembanyama saltó al rectángulo de juego después de un momento de reflexión en soledad y dejó una buena actuación con picos interesantes de rendimiento.
Tras el salto inicial, el frances realizó un tapón espectacular sobre Kyrie Irving, haciendo explotar al público que colmó el estadio en el debut como local de los Spurs. En ofensiva, su primera conversión fue desde el perímetro, en un lanzamiento a pie firme, nuevamente, la respuesta llegó desde las tribunas. Las expectativas sobre el “unicornio” son altísimas, y eso está claro. A medida que pasaron los minutos, la gigantezca humanidad del ex Metropolitans 92 fue eclipsada por la de un Luka Doncic que no estaba dispuesto a compartir el reflector de la gloria.
El esloveno dio cátedra en la noche y se lució en uno de sus roles más claros, sacar de la cancha a los rivales. El joven de 19 años admitió en la conferencia de prensa posterior que “no puso su energía en las cosas correctas”. “No necesito correr tantos riesgos en defensa. Estoy aprendiendo, no es sorprendente para un primer partido. Para mí, son cosas simples que se pueden ajustar fácilmente”.