Si buscamos en el diccionario la palabra madurez, se lee la siguiente definición: estado de una cosa que ha alcanzado su pleno desarrollo, o de una persona que ha alcanzado su mejor momento en algún aspecto. Martín Ezequiel Ojeda puede dar fe de ello. A poco más de un mes de cumplir 23 años (será el 27 de noviembre próximo), el zurdo volante del revolucionario Godoy Cruz Antonio Tomba de Diego Flores vive el mejor momento deportivo de una carrera profesional que comenzó hace más de cinco años, cuando debutó en la Primera de Ferro Carril Oeste tras llegar desde Sudamérica, el club de barrio en su Gualeguaychú natal.
Del año 2016 a esta parte, uno de los goleadores del campeonato -junto a José Sand- ha vestido cuatro camisetas diferentes. De ese comienzo auspicioso en el Verdolaga de Caballito, el entrerriano pegó el salto de calidad a un grande como Racing, que vio en él al sucesor natural de Marcos “Huevo” Acuña, con inicios en Ferro y un paso consagratorio por la Academia. “Llevátelo que es el nuevo Acuña”, le dijeron desde Ferro al presidente racinguista Víctor Blanco. Y Racing lo compró en 300 mil dólares.
Sin embargo, al cabo de dos temporadas con la camiseta blanquiceleste, en los que completó apenas 18 partidos y ningún festejo de gol, el Globo de Parque Patricios asomó en su horizonte como un destino potable para cumplir sus sueños de consolidarse en Primera División. Pero no. Otra vez las dudas y la falta de continuidad hicieron mella en su rendimiento.
En Huracán solamente disputó 12 encuentros y anotó un tanto oficial con su sello característico: volea (con el pie derecho) para abrir la cuenta en una goleada 3-0 ante Banfield en el Florencio Sola. Antes de eso, en el Bicentenario de San Juan, había metido una de sus habituales bombas de zurda desde afuera del área para igualar (1-1) un duelo amistoso de preparación frente a Universitario de Perú.
El colega Hugo Balassone recordó ayer en Radio La Red un dato que pinta de cuerpo entero lo que suele ser el fútbol en cuanto a los vaivenes de los protagonistas. Hoy estás arriba, mañana estás abajo y viceversa. “Llegó a estar en el banco de suplentes de la reserva de Racing en un partico contra Aldosivi de Mar del Plata. Eso fue en enero de 2019 y él estaba tramitando el pasaporte porque tenía una opción de jugar en la MLS de Estados Unidos. Era suplente de la reserva dirigida por el “Lagarto” Fleita y “Chiche” Arano. Hoy es el goleador del campeonato junto a Pepe Sand”, expresó el periodista ayer al mediodía en el programa “Un Buen Momento”, que se emite por la AM 910.
En agosto de 2000 desembarcó en Godoy Cruz. “Hicimos un gran esfuerzo para traer a este chico”, afirmaba el presidente tombino José Mansur en cada nota. Los primeros meses fueron difíciles. Era cuestión de tiempo. Porque incluso cuando al Tomba las cosas no le salían, él solía destacarse.
“Me siento cada día mejor y me estoy encontrando más completo, tanto en lo deportivo como en lo personal. Gracias a Dios este año me tocó ser papá (de Benjamín) y eso, con el apoyo de mi mujer, mi hijo y el resto de la familia que está en Gualeguaychú, me ha ayudado muchísimo a crecer y a prepararme mentalmente para todo lo que viene. En el fútbol la cabeza es lo que maneja todo y estoy tranquilo como lo estuve en el partido. De todos modos, no hay que conformarse e ir por más”, confesó Martín Ezequiel Ojeda en una nota con Los Andes al otro día de convertirle los dos goles de la victoria 2 a 1 al River de Marcelo Gallardo, quien hace tiempo lo sigue de cerca. “Saber que Gallardo me quiere en su equipo, me genera una gran emoción”, agregó algunos días después.
Hoy por hoy es el abanderado de la levantada impresionante del Tomba de Diego Flores, el ex asistente técnico y eventual traductor en las conferencias de Marcelo Bielsa en el Leeds de Inglaterra. Desde la llegada del entrenador cordobés, el Tomba ganó cuatro partidos, empató dos y eliminó a Racing y Tigre para avanzar por primera vez en su historia a las semifinales de la Copa Argentina.
En ese período, el zurdo de 22 años lleva siete goles y dos asistencias, pero su mérito es aún mayor ya que supo destacarse cuando al equipo no le iban tan bien las cosas en el inicio, y anotó otros cuatro tantos en las primeras 9 jornadas en las que el Tomba ganó solo 3, perdió 5 y empató 1.
La mitad de su pase pertenece a Godoy Cruz, el 30% todavía es de Racing Club y el 20% restante es de un grupo empresario. El potencial de Martín Ojeda parece no tener techo.
Diego Flores: “Nos ilusionamos”.
El equipo del “traductor” sigue imparable: nuevo triunfo, siete partidos invicto y en semis de la Copa Argentina por primera vez en la historia, otro hito en la historia del fútbol mendocino. “Somos candidatos como los otros equipos que han llegado a esta instancia, tenemos fundamentos para pelear de igual a igual con cualquier equipo, va a depender de como trabajemos para llegar de la mejor manera a la siguiente instancia”, confesó el DT.