Los pilotos de Fórmula 1 expresaron su descontento en el Gran Premio de Brasil, celebrado en el circuito de Interlagos, en San Pablo. El motivo fue las condiciones del asfalto. A pesar de las renovaciones realizadas en la pista este año, algunos de los principales competidores se han quejado de los baches que presentan las rectas y curvas del trazado.
Durante la sesión de prueba y la clasificación para la carrera Sprint, pilotos como Oscar Piastri, Max Verstappen y Lewis Hamilton compartieron sus impresiones sobre la calidad del asfalto, que consideran que no está de la mejor manera para los autos de la máxima categoría.
Oscar Piastri, quien se quedó con la pole position con 1′ 08.899, fue uno de los primeros en expresarse: “Creo que todo el mundo estaba un poco desconcertado por lo bacheada que estaba la pista”.
Además, aseguró que los equipos se vieron obligados a ajustar los autos para lograr algo de comodidad en la conducción. “Ver el final de la recta es el primer objetivo. (El asfalto) Es malo, está muy, muy bacheado”, concluyó.
Por su parte, Lewis Hamilton (11°) calificó la experiencia de manejo en Interlagos como “bastante mala para todos”. Max Verstappen (4°) también se sumó a las críticas, mencionando que el reasfaltado realizado este año en Interlagos “en realidad lo hizo peor para conducir” y que el alto número de baches es “extremadamente perjudicial para los autos”.
GP de Brasil: cómo es el Autódromo José Carlos Pace
El Autódromo José Carlos Pace, conocido popularmente como Interlagos, está ubicado en los suburbios de San Pablo. Originalmente diseñado por el urbanista francés Alfred Agache, el trazado fue rebautizado en los años 70 en honor al piloto José Carlos Pace.
La pista de 4.309 metros de longitud cuenta con 15 curvas y un recorrido en sentido contrario a las agujas del reloj, lo que hace de Interlagos un circuito exigente.