“Me voy feliz y tranquilo. Se cumplió una etapa y siento que un nuevo coach debe iniciar otra. Lo disfruté un montón pero es hora de que comience un nuevo proceso. No tengo tantos motivos para dejar la Selección, pero siempre mi carrera tuve la intuición de cuándo parar y empezar algo nuevo”, dijo el “Oveja” Hernández en declaraciones difundidas por el área de prensa de la CAB.
“Esto no es nada traumático porque acá lo importante es la Selección, no soy yo. Y la Selección no es de nadie sino de todos. Por suerte tenemos muy buenos entrenadores y yo voy a estar a disposición del que llegue, para que el sucesor tenga las herramientas y una base desde donde partir”, agregó.
Hernández dirigió tres Mundiales y es el segundo más ganador (récord de 21-5), detrás del estadounidense Mike Krzyzewski. Además deja el cargo con la mayor cantidad de partidos oficiales en la historia (116) y el mejor porcentaje de triunfos (72.4%, 84-32), con una medalla olímpica -bronce- y otra panamericana -oro-.
Por su parte Borro señaló: “La partida de Sergio es un hasta luego y no un adiós definitivo. Estos entrenadores que hemos tenido en este circuito virtuoso del básquet argentino, que empezó Horacio Muratore hace más de 25 años, van a estar siempre vinculados y cerca de la CAB, junto con los jugadores, profesionales y dirigentes, porque la Selección está por encima de todos”.
El directivo le obsequió al DT una camiseta argentina, con el N° 1 y su nombre en la espalda. “Sergio se adaptó muy bien a cada tiempo: mantuvo en la elite a la Generación Dorada, ganando hasta una medalla olímpica, y luego potenció a la nueva que hoy disfrutamos con aquel subcampeonato mundial en China”, resaltó.Y luego dijo: “Siempre le estaremos agradecidos por su enorme trabajo. Ahora se abre un nuevo desafío para él y para nosotros, buscando mantener al básquet argentino en la elite mundial”.