Cuatro ascensos y nueve campeones de las divisiones formativas se definieron en Fefusa. Las finales de Primera se jugaron en el “Torito” Rodriguez, uno de los estadios más modernos y cómodos de la provincia con una capacidad para 4.500 personas. La decisión, criticada por algunos, obedece al compromiso de la Federación con sus entidades afiliadas de brindar este tipo de escenarios a los equipos que llegan a estás instancias a pesar de lo difícil que resulta por la poca infraestructura disponible de esta envergadura. Salvo el Aconcagua Arena dónde se jugaba el Nacional de Tenis de Mesa, el “Torito” pudo albergar el gran marco de público que acudió a la cita y la vivió cómodamente gracias a la capacidad que brinda.
Los cuatro partidos jugados en el Este definían los títulos de la Primera B y Primeras C masculinas y femeninas y daban un ascenso a los ganadores para el 2023.
Sanidad es de de la A
Se tenía que dar... Era cuestión de tiempo. Se escapó por muy poco el año pasado y quizás podría haber pasado ahora, pero la realidad es que Sanidad tiene una marca registrada, un juego que es admirado por todos y el ascenso a Primera A era una consecuencia. Todo fruto de un trabajo serio, responsable, ordenado.
Con todos jugadores surgidos de la casa, del barrio. Lo que da un plus por el sentido de pertenencia. Los pibes fueron creciendo y haciendo de su equipo un muestrario de buen juego. Ahí están Tomás Gellon, Luca Belelli, Federico Castro, Pablo Sánchez, Rodrigo Pereira, Nahuel Castro, Alejandro Vizcaya, Mauro Malanca, Ariel Alonso, Matías Origaen, Tomás Molina, Franco Sanchez y Lautaro Bricco, cada uno aportando lo mejor de sí. Todos reunidos en un solo abrazo, dando lugar en el festejo a Agustín Recabarren y a Giuliano Cappezzone, referentes de otras épocas y técnicos en la actualidad.
Hicieron una campaña soñada. Nadie pudo frenarlos. Regatas (al que hay que destacar su buen torneo) fue un partenaire en la final. Es que la sinfonía “Verde” sonó mejor que nunca en ese teatro de los sueños que es el “Torito” Rodriguez. Se vienen lindos desafíos para el “Sani” ahora. Y de los lindos. Recordemos que, además, ascendió a la Copa de Oro de las formativas. Casi nada para un semestre.
San José y un festejo esperado
Las chicas del “Sanjo” vencieron 3 a 1 al CUC en la inédita final de la Primera B y consiguió su lugar en el círculo máximo del futsal femenino para la temporada 2023. Las Carceleras dieron un golpe de nocaut cuando abrieron el marcador a los 30 segundos. Siempre un gol así rompe cualquier plan previo. CUC necesitó unos minutos para reponerse, pero después lo hizo de la mejor manera. Fue, fue y fue, pero San José cerro los caminos. Seguramente aquella final perdida frente a Luján en el Polimeni hace seis meses le hizo aprender la lección. No había que regalar nada.
El 1 a 0 fue el resultado con el que se fueron al descanso y dejaba todo abierto. Los primeros minutos fueron un monólogo de CUC pero la falta de fineza en la definición y una arquera que se iba agrandando con el paso de los minutos hicieron que todo se fuera inclinando para el equipo de Facu Matilla y Matías Brandi.
Para colmo, Julieta Tieppo metía corridas que minaban cualquier resistencia y así, de contragolpe, pero siendo efectivas cien por cien, las Carceleras cerraron un torneo soñado. Se concretó lo que para muchos era una cuestión que debía darse en algún momento, el ascenso de un equipo que jugó bien desde su concepción allá por agosto de 2019.
Las Heras manda en la C
Cementista en masculino y Las Heras “A” en femenino se quedaron con los títulos y los ascensos en la tercera categoría. Ambos equipos venían de perder la categoría en diciembre y la recuperaron rápidamente.
Las Heras que superó a Don Orione B por 6 a 0 lo ganó casi desde los vestuarios con una Sofía Pizzolatto (goleadora del torneo) imparable, la solvencía de Victoria Sánchez y la seguridad de Sofía Gazziro en el arco.
El equipo de Guillermo Morales fue edificando una victoria muy sólida y cerró un torneo casi perfecto. Es que el único partido que perdió fue por una cuestión reglamentaria.
Un campeón brillante que busca reverdecer viejos laureles
El equipo C de Cementista superó por 7 a 4 a Carrodilla en un atractivo partido.
Parecía fácil para los lasherinos que fueron minando la defensa del Carro y se fueron 3 a 0 al descanso, pero Carrodilla fue otro en el segundo tiempo, los pibes le dieron otro ritmo a su juego y comenzaron a poner interrogantes sobre el resultado final. En un momento era festejo en un arco y festejo inmediato en el otro. El partido estaba a la altura de una gran final. Cementista pudo mantener la ventaja que había conseguido y así festejar su regreso a la máxima categoría del ascenso, la que ya ganó en el 2019.
Formativas: los más chicos también tienen a sus campeones
Nueve campeones de nueve clubes distintos hubo en las formativas masculinas, algo que demuestra el buen trabajo que viene realizando todas las instituciones.
En Copa de Oro, los festejos fueron para Alemán en C 15 que le ganó la final a San Martín, en C 17 el campeón fue San Pablo tras vencer a Villa Hipódromo y en C 20 el que levantó la Copa fue Don Orione superando a Regatas.
En Copa de Plata, el ganador de la C 20 fue Sanidad que le ganó un durísimo partido a Godoy Cruz (fue el único club que llegó a dos finales), en C 17 el título viajó para Alianza Guaymallén que necesitó llegar a los penales para superar a Ujemvi y en C 15 quedó para Godoy Cruz que superó a Carrodilla.
En Bronce, por su parte, el C 15 lo ganó Martín Zapata frente a Ramef, el 17 fue para Gimnasio 1 que venció al CUC y en C 20 el gran festejo fue de Argentino de Ruttini que venció a Circulo Policial. Gentileza: Prensa Fefusa.