En lo que significó el retorno a su estadio después de 50 días, Independiente Rivadavia jugó muy mal ante Barracas Central y se le escapó la gran chance de treparse a la punta de la zona B, propiedad absoluta de Güemes de Santiago del Estero que igualó con San Telmo.
El “Guapo”, el equipo de Chiqui Tapia, presidente de la AFA, fue superior a Independiente. Desde el primer minuto de juego, tuvo el dominio del balón en forma absoluta, adelantó sus líneas y por momentos, borró al equipo Azul del campo de juego. Sin embargo, esa superioridad no la pudo plasmar en la red de la Lepra, porque siempre chocó con Cristian Aracena que tuvo un gran partido.
En el segundo tiempo, el Azul reaccionó, recuperó algo de orden y generó algunas situaciones de peligro. Sin embargo, el equipo de Gabriel Gómez estuvo muy lejos de su nivel habitual.
Sobre el final del partido, el árbitro Giménez, no cobró un claro penal de Disanto sobre Stable, que desató la furia de todo el elenco visitante.