Tras el caótico final que tuvo el Gran Premio de Gran Bretaña de Fórmula 1 el pasado domingo, Pirelli dio a conocer los motivos por los que se reventaron los neumáticos en el final de la competencia que ganó de manera agónica Lewis Hamilton.
En el epílogo de la prueba, Carlos Sainz y Valtteri Bottas sufrieron la rotura del neumático delantero izquierdo y debieron pasar por boxes para poder completar la competencia, perdiendo muchísimo terreno. Por su parte, Hamilton tuvo problemas en la misma cubierta, pero logró llegar a la bandera a cuadros.
Después de la carrera, Pirelli comenzó a investigar lo sucedido y este marte informó en un comunicado lo acontecido con los neumáticos. “La razón clave se debe a circunstancias concretas de la carrera que llevaron a usar de manera extremadamente prolongada el segundo juego de neumáticos”, rezaba la información en primera instancia.
Y seguía: “El segundo coche de seguridad llevó a que casi todos los equipos anticiparan sus paradas en boxes y a realizar un largo relevo final: de unas 40 vueltas, lo cual es más de tres cuartos del total de la distancia de carrera en uno de los circuitos más exigentes del calendario”.
La fábrica italiana remarcó que el aumento de ritmo de los autos de esta temporada 2020 hizo que los últimos giros fueran “especialmente duros como consecuencia de las cargas más elevadas que unos neumáticos hayan tenido que soportar nunca en la F1”.
En tanto, desde la empresa de Milán no se refirieron al respecto del pinchazo en la cubierta trasera derecha que produjo el despiste y posterior golpe de Daniil Kvyat con su Alpha Tauri.