El delantero de Boca Juniors, Darío Benedetto, aseguró que si en algún momento debería jugar “en otro equipo sudamericano” distinto al xdneize, prefiere “retirarse del fútbol”.
“Lo cierto es que nunca pensé en irme de Boca, y cuando me llegó la oferta de Inter de Porto Alegre, le dije a mi representante que en el único equipo de Sudamérica en que voy a jugar es en Boca, y si tendría que hacerlo en otro lado, prefiero retirarme del fútbol”, destacó Benedetto en ESPN , de 33 años.
“Lo que pasa es que en los últimos tiempos tuve problemas personales que me afectaron mucho, así que iba a entrenar y a casa. Por suerte tuve la ayuda de una psicóloga durante los últimos cuatro años y ahora estoy bien, pero uno no es un robot y nunca puede estar siempre bien”, remarcó.
Benedetto aceptó por ejemplo que al cuestionar a su ex compañero en Boca, Agustín Almendra, al que ahora enfrentará en cuartos de final de Libertadores, quedó “como un bocón”, pero que no se arrepiente y lo saludaría en caso que se crucen en esos partidos, “aunque no lo abrazaría. Pero debo reconocer que es un crack”.
“Y en cuanto a la llegada de Edinson Cavani, se habló mucho, pero la verdad que él es un referente a nivel internacional y tenemos ahora una competencia muy buena también con Miguel Merentiel por un lugar, que está haciendo goles y jugando muy bien”, explicó.
“Pero lo concreto es que ahora me siento bien, dejé atrás la tristeza y eso quedó demostrado el otro día, cuando pateé un penal de 700 kilos contra Nacional, pero me tenía la confianza necesaria hasta para volver a errar. Inclusive iba a ejecutar el primero y no el segundo, pero como me lo pidió el ‘Changuito’ (Exequiel) Zeballos, se lo dejé”, aclaró.
Posteriormente sostuvo que dentro de la cancha le gusta “hacer enojar a los rivales” y en ese aspecto resaltó la personalidad del juvenil Valentín Barco, aunque admitió que si lo tuviera de rival y recibiría algunas de sus acciones “seguramente terminaría expulsado”.
“De todas maneras debo aceptar que muchas veces me equivoqué dentro de la cancha, porque pensé que algún rival era un idiota y resulta que después lo conocí bien y era una buena persona y hasta tuve una excelente relación”, apuntó.
“Ojalá Barco se quede en Boca hasta terminar la Libertadores (Brighton and Hove, de la Premier League, inició conversaciones para llevárselo), porque también es crack, y es chico todavía, porque apenas tiene 19 años”, remarcó.
Finalmente Benedetto sostuvo que su relación con el vicepresidente Juan Román Riquelme “es buena como con el resto de la dirigencia. Hubo algún chispazo por el tema de los premios, pero ya quedó atrás”.
Y finalmente confió que es “bueno que River se haya quedado afuera de la Copa Libertadores. Es un alivio, porque por el nivel de juego que tiene era uno de los candidatos a pelear por el título”, concluyó Benedetto, quien reconoció que los hinchas de Boca siempre lo “bancaron”, hasta que su nivel bajó “y entonces todos empezaron” a pedirle “la cabeza. Pero estoy agradecido y me siento en deuda con ellos”, aceptó.