Paulo Dybala admitió su error y pidió perdón por violar las normas de seguridad sanitaria en Italia, en el marco de la pandemia de coronavirus, al participar en una cena en casa de su compañero en Juventus, el estadounidense Winston McKennie.
La cena, en la que también estuvo presente el brasileño Arthur, se interrumpió cuando la policía llegó al lugar alertada por los vecinos y multó a los participantes, que eran alrededor de diez personas.
“Sé que es un momento difícil para el mundo debido a la pandemia y hubiese sido mejor no equivocarme, pero me equivoqué al participar de la cena”, agregó Dybala, pero aclaró con énfasis que “no era una fiesta”, como algunos sugirieron.
El argentino fue protagonista de una campaña contra la Covid-19 en Piemonte tras haber contraído el virus al igual que su pareja, Oriana Sabatini, hace poco más de un año y en los primeros meses de la pandemia, recordó la agencia italiana ANSA.
Dybala, que no juega desde que se lesionó la rodilla izquierda a principios de enero frente a Sassuolo, apeló a la red social Instagram para disculparse públicamente por lo sucedido, mientras Juventus evalúa eventuales sanciones para los implicados.