Desbordados de felicidad una vez concluido el clásico sudamericano y olímpico contra Brasil, los jugadores del seleccionado argentino de voley festejaron por la tercera medalla olímpica para nuestro país, y la primera para el voley nacional. Los de Marcelo Méndez hicieron historia en estos Juegos de Tokio 2020, por las manos firmes en el bloqueo del mendocino Agustín Loser.
Justamente el joven jugador de Tourcoing de Francia, con paso por Ciudad y Bolívar en la Liga Argentina, se expresó minutos después de la victoria que se definió por un durísimo tie break. Y soltó: “Tengo una felicidad inexplicable, no sé qué está pasando”.
Y luego agregó: “Todos hicimos un gran partido porque es imposible ganarle a este equipo si no están todos muy bien. Supimos dar vuelta un partido muy difícil. Hace tres meses que nos fuimos de Argentina, la luchamos mucho. Vale la pena después de tanto sacrificio”, declaró el jugador de 23 años.
”Hemos tenido un aguante increíble, nunca había vivido algo así, le agradezco a toda la gente, ojalá que sigamos por este camino. Fue algo mágico, fruto del trabajo de todo el equipo. Le agradezco a todos”, confió el líder de la estadística del partido en ese rubro (7 tantos).
Argentina venció esta madrugada al seleccionado número 1 del mundo y último campeón olímpico por 3-2 (25-23, 20-25, 20-25, 25-17, 15-13).
El jugador de Tourcoing de Francia, con pasado en Ciudad y Bolívar en la Liga Argentina, manifestó una “felicidad inexplicable” por subirse al podio en sus primeros Juegos Olímpicos.
Por su parte, Sebastián Solé dijo: “Se me puso el piel de gallina cuando vi que Agus (Loser) metió el bloqueo. Esta medalla es de diamante, vale mucho mas que el oro. Es difícil estar al nivel de los grandes, son equipos que están acostumbrados a jugar estos partidos. Esto es una alegría inmensa para todos los jugadores que estamos acá empujando para el crecimiento del voley. Es difícil tomar dimensión de lo que significa esto, nuestros deporte está tratando hace mucho tiempo de dar este salto y conseguir algo importante”.
En tanto que el sanjuanino Bruno Lima sostuvo “Es un orgullo darle una medalla a Argentina. Nos rompimos todos para estar en esta situación. El grupo que nos había tocado era imposible. Tengo una gran emoción, fue un torneo durísimo, con mucha presión y muchos nervios. Mostramos un cambio de mentalidad increíble. Esto es importante a nivel nacional para que los chicos se sumen a este deporte hermoso. Yo empecé en Obras de San Juan a los 6 años junto con mis hermanos. En el club hice muchos amigos, mi vida fue el vóley. Ojalá que muchos chicos se sumen a partir de esto”.
Finalmente, el armador Luciano De Cecco concluyó: “Gracias a todos por estar, por bancar, esto es una alegría del alma. Hay que disfrutarla todos juntos. Es un premio al esfuerzo, este grupo creyó más que nadie en si mismo. Fuimos por lo imposible. Ojala que el vóley agarre este empuje para seguir creciendo”.