A paso de candidato, con certezas y una jerarquía individual al servicio de lo colectivo, Mendoza sumó un triunfazo ante Mar del Plata, en el marco de los cuartos de final del Argentino de Selecciones que se disputa en Posadas. De esta manera, tras el contundente 6-0, la Borravino asoma como gran protagonista en la definición de esta competencia, aunque primero deberá sortear hoy un duro escollo: el seleccionado de Corrientes.
Con mucha movilidad, Mendoza consiguió romper rápidamente la defensa rival y las ocasiones no tardaron en sucederse. Sin embargo, en un comienzo de mucho vértigo y fricción, no hubo precisión en la definición. Y cuando Koltes quedó de cara al gol, Suárez respondió debajo de los tres palos marplatenses.
Los del Atlántico eligieron la misma vía que en el choque anterior frente a los mendocinos: salida rápida para intentar sorprender.
Promediando la etapa, la Borravino eligió sumar toques y movimientos para bajarle el ritmo a un duelo que podía traer algún disgusto en el intercambio de golpe por golpe.
Gallardo, buscando darle aire al equipo, realizó una modificación en el cuarteto de campo, con ingresos de Brasili, Páez, Civelli y Gallina. Y aunque Suárez fue clave bajo los tres palos para sostener el cero, bastó que Páez frotara la varita mágica para que llegue la apertura del marcador vía Gallina. Y casi de inmediato, otra vez con Páez como inicio, Brasili jugó para Civelli y quedó establecido el 2-0 con un verdadero golazo.
En la segunda mitad, el dominio mendocino se acentuó y las diferencias fueron abrumadoras, aún con el buen trabajo de Suárez bajo los tres palos. A diferencia de la primera mitad, donde Mar del Plata incomodó a los mendocinos, en el capítulo final se sintió el desgaste realizado a lo largo de estos días de competencia y padeció el enorme poderío ofensivo del conjunto mendocino, que demolió las aspiraciones atlánticas.
