Minutos previos al inicio del partido entre San Martín de Tucumán y Belgrano de Córdoba, por la fecha 33 de la Primera Nacional, se vivió un momento de tensión, ya que una discusión entre hinchas del “Ciruja” derivó en el asesinato de un simpatizantes a metros del estadio.
El propio presidente de la entidad tucumana, Rubén Moisello, admitió con total naturalidad la violencia desatada en las inmediaciones del estadio La Ciudadela, a pocas cuadras del acceso principal de los hinchas locales.
“Hay un fallecido de un tiro en la nuca, me comentan. Están dadas las condiciones para jugar el partido, más allá de este hecho policial”, reconoció el dirigente, en declaraciones a DSports Radio.
“Nada justifica perder una vida. La policía determinará cómo sucedió y quiénes son los responsables. Nos garantizaron que el partido se pueda jugar con normalidad”, amplió el titular del Santo tucumano.
El gravísimo hecho se produjo “a pocas cuadras del ingreso a la cancha”, en la confluencia de las calles Frías Silva y Bolívar.
Dos sectores de la barra de San Martín se enfrentaron por motivos que se desconocen y un simpatizante del equipo tucumano, vestido con una camiseta de color blanco con vivos rojos, fue “muerto de un impacto de bala”, según revelaron los portavoces.
Efectivos policiales “acordonaron la zona donde se produjo el ataque y los peritos deberán empezar a trabajar con la investigación”, sostuvo la fuente consultada.